La ciudad de Roswell ha causado descontento al cerrar el acceso a la popular cascada Roswell Mill-Vickery Creek. Según el sitio web de la ciudad, esta medida busca proteger el entorno natural del parque, que ha sido afectado por el elevado número de visitantes.
Aunque el acceso al agua está prohibido desde el viernes, los senderos que rodean la cascada seguirán abiertos para el público.