Republicanos y demócratas se enfrentaron en un tribunal del condado de Fulton para debatir sobre dos nuevas reglas electorales aprobadas por la Junta Electoral del Estado. Durante una audiencia ante el juez de la Corte Superior Robert McBurney, los republicanos defendieron estas medidas como «necesarias para asegurar la integridad electoral», mientras que los demócratas expresaron su preocupación por el impacto que podrían tener en la certificación de votos.
Las dos reglas en cuestión establecen un recuento manual de votos tras el cierre de las urnas y otorgan a los superintendentes la autoridad para rechazar la certificación de votos si consideran que pueden ser fraudulentos o erróneos.
El Partido Demócrata Nacional, que se ha opuesto a estas medidas, argumentó que permitir que los superintendentes retengan la certificación por sospechas podría generar caos y disminuir la confianza en los resultados electorales. Daniel Volchok, abogado demócrata, destacó que la ley ya permite excluir votos inválidos, por lo que estas nuevas reglas podrían ser redundantes.
Por otro lado, Julie Adams, miembro republicana de la Junta Electoral de Fulton, respaldó las nuevas normas, expresando su incomodidad con el proceso de certificación actual.
El juez McBurney no tomó una decisión inmediata sobre las reglas y se espera que emita un fallo en las próximas semanas. El veredicto podría tener un impacto significativo en cómo se gestionan las elecciones en Georgia, estado clave en la política nacional, lo que augura un prolongado debate entre republicanos y demócratas sobre la integridad del sistema electoral.