Casi un mes después de que Sonya Massey fuera asesinada a tiros por un oficial en Illinois, una multitud se reunió en Atlanta para honrar su memoria y la de otras víctimas de la violencia policial. En la Iglesia Bautista de Park Avenue, fotos de los fallecidos llenaban las bancas durante el servicio conmemorativo. Las familias se unieron para crear conciencia sobre la brutalidad policial.
Toni Franklin-Boykins recordó la muerte de su hijo, Le’Den Boykins, de 12 años, en septiembre de 2021. Murió cuando un oficial de la Patrulla Estatal de Georgia realizó una maniobra de PIT, causando que el coche en el que viajaba se volcara.
Wanda McGilberry, amiga de la familia de Christon Collins, compartió la historia de Collins, un veterano discapacitado con enfermedad mental, que falleció en la cárcel del condado de DeKalb en marzo. Se sospecha que estuvo inconsciente en el suelo durante horas antes de recibir ayuda.
Jimmy Hill, padre de Jimmy Atchison, relató que su hijo fue asesinado en enero de 2019 por un oficial con un historial de comportamiento agresivo. Hill expresó su frustración ante la falta de acción contra la brutalidad policial y llamó a la comunidad a dejar de guardar silencio.