El hombre acusado de asesinar a una estudiante de enfermería en el campus de la Universidad de Georgia (UGA) ha solicitado la supresión de pruebas en su caso, según documentos judiciales recientes. José Ibarra, de 26 años, enfrenta cargos graves por la muerte de Laken Riley, una estudiante de la Universidad de Augusta, ocurrida el 22 de febrero en una zona boscosa cerca del lago Herrick en el campus universitario.
Ibarra ha sido acusado de varios delitos, incluidos asesinato con alevosía, secuestro con lesiones corporales y asalto agravado con la intención de violar. Los documentos judiciales indican que las pruebas clave, como dos teléfonos celulares, datos de redes sociales, información de ubicación y «evidencia genética y física,» fueron incautadas sin la debida causa probable.
La investigación fue realizada por el Departamento de Policía de la UGA, la Oficina de Investigación de Georgia, el FBI y otras agencias. Durante la investigación, se emitieron múltiples órdenes de registro, lo que permitió la incautación de 10 dispositivos electrónicos y la recopilación de hisopos bucales, fotografías de marcas en el cuerpo de Ibarra, y datos de redes sociales como Snapchat, TikTok e Instagram.
Los documentos legales argumentan que estas pruebas deberían ser excluidas del caso, describiéndolas como «fruto del árbol venenoso,» sugiriendo que fueron obtenidas ilegalmente. También afirman que Ibarra fue detenido sin la sospecha razonable necesaria cuando la policía ingresó a su apartamento en Athens sin una orden judicial, al día siguiente de que Riley fuera encontrada muerta.
El juez encargado del caso ha declarado que espera comenzar el juicio en noviembre.