No están siendo los mejores días para Blake Lively. La actriz, a la que conocimos de la mano de Gossip Girl, la ficción adolescente que sigue levantando pasiones en las nuevas generaciones y en la interpretó a Serena van der Woodsen, estrenó la semana pasada Romper el círculo, la adaptación cinematográfica de la novela superventas de Colleen Hoover. Cuando todo el mundo pensaba que la polémica surgiría a raíz de la propia historia que ésta narra (pues el libro ya fue ampliamente criticado por tratar temas como la violencia doméstica o el abuso desde una perspectiva un tanto idealizada), las diferencias en el rodaje, producción y promoción de la cinta entre Lively y el director y coprotagonista, Justin Baldoni (a quien conocimos en Jane The Virgin), están siendo clave.
Según cuenta The Hollywood Reporter, la actriz, que interpreta a Lily Bloom, quiso que el montador de Deadpool y Lobezno (película de la que forma parte su marido, Ryan Reynolds) hiciese su propio corte de la película, una decisión que habría generado mucha tensión en la fase de posproducción entre ella, que también estaba metida en el proceso de producción de la adaptación, y Baldoni. Las diferencias no acaban ahí, pues durante las entrevistas que Lively ha ido efectuando para promocionar Romper el círculo (It ends with us en inglés), la intérprete ha ha puesto ejemplos de cómo algunas de las cosas que quería introducir en la película no recibían el visto bueno por parte del director.
Vamos con un hilo explicando todo lo que está pasando entre Blake Lively y Justin Baldoni tras el lanzamiento de la película “ROMPER EL CÍRCULO” (It Ends With Us) 👇 pic.twitter.com/6LwZ16TLZj
— fefe (@fedeebongiorno) August 14, 2024
En una entrevista con Hits Radio UK, Lively dejó entrever las diferencias creativas que dificultaron dicho proceso (y que parecen haber hecho mella en la promoción de la cinta). Preguntada por el empleo de la canción Cherry, de Lana del Rey, la actriz decidió tirar de la lengua. “Me rogaron que quitara esa canción de la película”, alegó. En otras respuestas que ha dado a otros medios se puede apreciar a la intérprete mencionado, de forma desmesurada, a la cinta de su marido (Deadpool y Lobezno), en lo que diversos usuarios de TikTok han considerado como un intento de Lively de hacer que su película y la de su pareja tengan un cruce similar al de Barbenheimer.
Sus constantes pullas, las diferencias a la hora de hablar de la película en las presentaciones ante los medios (Baldoni ha empleado su altavoz para concienciar sobre la violencia de género, mientras que Lively ha hablado de Lily Bloom como una mujer que es mucho más que una “víctima” o una “superviviente”, ensalzando otros aspectos de la protagonista de la historia de Hoover). “La película trata la violencia doméstica, pero lo importante de esta película es que no es sólo una superviviente y no es sólo una víctima”, dijo a la prensa. “Y aunque son cosas muy importantes, no son su identidad. No se define por algo que alguien le haya hecho o por un suceso que le haya ocurrido, aunque sean múltiples sucesos”, añadió en unas declaraciones que han viajado por todas las galaxias de internet.
Toda esta caótica situación ha generado dos bandos: los que creen que la protagonista del drama ha sido la actriz al cuestionar algunas de las decisiones del director, y aquellos que ven en Baldoni el único responsable del caos mediático que se ha generado en torno a la promoción de Romper el círculo. Ante las críticas que Lively ha recibido, la intérprete ha decidido responder a las voces que han cuestionado su forma de ‘vender’ y promocionar, no sólo la película, sino su delicada temática. “Gracias a todos los que vinisteis a demostrar que la gente quiere ver películas sobre mujeres y las multitudes que albergamos. It Ends With Us es una historia de la experiencia femenina”, ha comentado en una publicación en sus stories de Instagram.
Tras todo lo ocurrido, Baldoni ha contratado a la veterana representante Melissa Nathan, una experta a la hora de navegar las crisis reputacionales (que trabajó con Johnny Depp durante su mediático juicio con Amber Heard). El actor y director, que interpreta a la pareja de Bloom en la cinta, también ha dejado alguna que otra perla en sus entrevistas en la alfombra roja. Preguntado por si dirigiría la secuela de Romper el círculo, titulada Volver a empezar, Baldoni sugirió que fuese la propia Lively la encargada de hacerlo: “Hay gente mejor para hacerlo”, dijo, dejando entrever las más que confirmadas diferencias dentro y fuera del rodaje entre ambos.
La polémica de la polémica
Cuando parecía que la adaptación de la novela de Colleen Hoover iba a reavivar la polémica que, en su día, generó su obra, el drama entre Justin Baldoni y Blake Lively ha copado todos los titulares. Sin embargo, el lanzamiento del libro también tuvo su dosis de controversia. Su premisa es, en primera instancia, sencilla. Lily Bloom no ha tenido una vida fácil. Ha crecido viendo los constantes abusos de su padre hacia su madre, una situación que ha hecho mella en su estado de ánimo. Por eso, su idílica relación con el neocirujano Ryle Kincaid (Justin Baldoni) parece ajena a su no tan idílica realidad familiar. Las cosas se complican cuando Atlas Corrigan (Brandon Sklenar), el primer amor de Lily, reaparece en su vida.
La sinopsis oficial insiste en que, con la aparición del tercero en discordia, el personaje de Ryle “comienza a mostrar su verdadera cara”, un manido enunciado que esconde la tóxica relación entre ambos. En realidad, Romper el círculo fue la forma en la que Hoover lidió con los abusos que vio en su núcleo familiar. A través de la escritura exorcizó los fantasmas de las escenas de las que tuvo que ser testigo cuando era una niña.
“Uno de mis primeros recuerdos era él tirándole un televisor a mi madre”, dijo de su padre biológico al magacín televisivo Today. “Crecimos en un hogar abusivo”, apostilló. “No había recursos para que las mujeres salieran de situaciones así”, continuó. La madre de Hoover se divorció de su padre cuando ella tenía 2 años, por lo que “a partir de entonces, sólo recuerdo haber crecido con una madre tan fuerte e independiente”. Lanzada en 2016, la novela no se convirtió en un fenómeno hasta el auge de TikTok (entre 2021 y 2022).
Colleen Hoover y Blake Lively en el evento 'Book Bonanza' de 2024
Su historial personal ha inspirado una de las obras más populares de la última década (la autora vendió más de nueve millones de copias con todos sus libros en el 2022), pero su éxito ha traído consigo infinidad de críticas que apuntan hacia una ‘romantización’ de la violencia y los abusos que se narran en el relato. Romper el círculo (It ends with us en su título original), está catalogada como una novela de romance, pero sus páginas esconden escenas que describen, con mucho detalle, situaciones como una violación, abusos verbales y físicos, además de violencia gráfica.
El éxito de la novela ha venido, así, acompañado de una polémica en la que crítica y público consideran que Hoover tiende a glorificar el abuso y la violencia en su historia (algo que podría trasladarse a la adaptación cinematográfica que lidera Lively). Sin embargo, en la ya mencionada entrevista con el programa televisivo matutino, la autora prefiere centrarse en cómo su novela ha ayudado a personas que han pasado por la misma situación que su madre, y no tanto en las voces críticas que ven en su relato una idealización de las relaciones tóxicas.