La historia nos acercará la vida del famoso general y posterior emperador francés, Napoleón Bonaparte. Está programada para ser distribuido por Apple Studios en su plataforma de streaming, Apple TV +, aunque no se descarta el paso por salas para que sea elegible para los próximos Premios Oscar. Está escrita por David Scarpa, quien previamente trabajó con Scott en ‘Todo el dinero del mundo’, y producida por Scott y Kevin J. Walsh (‘Manchester frente al mar’, ‘Muerte en el Nilo’).
Como protagonista, Scott ha contado con un viejo conocido, Joaquin Phoenix. Al ganador del Oscar por ‘Joker’ le dirigió hace más de dos décadas en ‘Gladiator’, donde ya ejerció como Emperador con su cruel personaje, Cómodo. Ahora repetirá el cargo. De imperio a imperio y tiro porque me toca.
Lo destacable
El énfasis en los cañones. Ridley Scott ha visto muy bien lo esenciales que fueron en la carrera de Napoleón. Las piezas de su Gran Batería eran “sus hijas mimadas”. Pocas veces se ha visto en el cine (ni siquiera en Los cañones de Navarone) un tronar de artillería como en la película (y los efectos de las balas de cañón), lo que proporciona una sensación muy real al espectador de estar en un campo de batalla napoleónico.
El director envuelve su película en magníficas texturas y colores muy pictóricos, demostrando que se ha inspirado en los cuadros de la época. Junto a la música original de Martin Phipps, coros corsos, canciones populares de la época, como La Carmagnole, y piezas clásicas, especialmente Haydn.
Josefina. La composición del personaje que brinda la actriz Vanessa Kirby es excelente. Muy atractiva con el look de pelo corto (un estilo ideal para la guillotina, de la que, se nos explica, sólo se libró por estar embarazada), está convenientemente seductora e impúdica en sus primeras apariciones, pese a que la Josefina real trataba de sonreír poco para que no se le vieran los dientes rotos y negros a causa de la mucha caña de azúcar.
Lo cuestionable
La rapidez con que pasa por la pantalla la vida de Napoleón (si hoy es viernes esto es Jena). Es cierto que fue comparado con un astro fulgurante y que una de sus principales virtudes en la guerra era la velocidad (por no hablar de lo ya apuntado del sexo), pero realmente hay demasiados saltos y se renuncia a muchas cosas fundamentales. Su parte intelectual, por ejemplo.
La ausencia absoluta de la guerra de España. No es de recibo, aunque la haga un británico, que una película sobre Napoleón prescinda del decisivo escenario peninsular. Nos hemos quedado (a la espera de lo que pueda deparar la versión original de cuatro horas en Apple TV+) sin ver a Ridley Scott emular la paleta de Goya, y sólo podemos imaginar lo que hubiera hecho con la famosa carga de los lanceros polacos en Somosierra
La masacre en el hielo de Austerlitz. Ridley Scott se ha quedado con el mito de la destrucción de los ejércitos ruso y austriaco en los lagos helados. La escena es una gran exageración (parece que estemos en la batalla del lago Peipus, en 1242, donde Alexander Nevski zurró a los Caballeros Teutónicos), aunque funciona cinematográficamente
¿Sabías qué?
- Con Napoleón, Ridley Scott cumplió su deseo de volver a trabajar con Joaquin Phoenix casi un cuarto de siglo después de Gladiator (2000), donde el actor interpretó a Cómodo. El director reveló en una entrevista a Empire que había reescrito la película para adaptarla mejor a Phoenix, con el fin de ayudarle a meterse en la mentalidad adecuada de Bonaparte
- Quizás hubiese ocurrido una segunda colaboración entre Ridley Scott y Jodie Comer, actriz a la que el director ya había dirigido en su anterior película histórica ‘El último duelo’ (2021). De hecho, ella fue la elegida por Scott para interpretar a Josefina Bonaparte, papel que Comer se vio obligada a rechazar por conflictos en su agenda.
- Quizá no todo el mundo sepa que el título provisional de la película era originalmente Kitbag inspirado en el dicho que reza: ‘En la alforja de todo soldado se esconde el bastón de un general’. Kitbag significa en realidad ‘haversack’, es decir, la bandolera de lona en la que los soldados guardaban originalmente el pan.
- Joaquin Phoenix no es el primer actor que ha interpretado el papel de Napoleón Bonaparte. Antes que él, el emperador francés fue interpretado por: Charles Boyer en ‘Maria Walewska’ (1937), Renato Rascel en la comedia Napoleón (1951), Marlon Brando en ‘Désirée’ (1954), Pierre Mondy en ‘La batalla de Austerlitz’ (1960)