La reconocida actriz de Gossip Girl, Blake Lively, de 36 años, compartió abiertamente sus reflexiones sobre el equilibrio entre su vida laboral y personal. Durante el rodaje de su última película, ‘Todo termina con nosotros’, Lively encontró un apoyo significativo en su compañera de reparto, la actriz Jenny Slate. Ambas, madres de niños pequeños, descubrieron muchos puntos en común que hicieron más llevadera la experiencia de filmar lejos de sus familias.
En declaraciones para el programa estadounidense, Entertainment Tonight, Lively expresó cuánto significó para ella la relación con Slate: “Quiero mucho a Jenny y fue un ancla para mí en muchos sentidos. Está llena de amor y luz, pero también tiene los pies en la tierra”. Esta conexión se fortaleció a través de sus discusiones sobre cómo equilibrar la pasión por su trabajo con sus responsabilidades familiares. Lively agregó: “Amamos nuestro trabajo y lo tomamos muy, muy en serio […] pero nuestra vida personal nos define mucho más que nuestro trabajo. Y podemos ser ambas cosas a la vez”.
Por su parte, Jenny Slate, quien es madre de una niña de tres años llamada Ida, compartió su admiración y gratitud hacia Lively: “Me enamoré profundamente de ella. Obviamente, he admirado a Blake durante tanto tiempo […] es tan fresca, tan detallista, tan preparada”. Según lo detallado por Entertainment Tonight, Slate valoró las largas conversaciones que mantuvieron fuera del set y afirmó: “Nunca esperé tener la experiencia fuera del set que tuve […] Estoy muy agradecida por esta dulce persona”.
Lively y Ryan Reynolds, su esposo, comparten cuatro hijos: James (9), Inez (7), Betty (4) y Olin (17 meses). Lively admitió sentirse a menudo culpable por estar ausente durante largas horas de trabajo, separada de su vida familiar.
Durante la promoción de ‘Todo termina con nosotros’, basada en la novela de Colleen Hoover, ambos actores mostraron gran entusiasmo por la película. En esta cinta, Blake Lively interpreta a Lily Bloom, la propietaria de una floristería que navega por una compleja relación con su novio Ryle Kincaid, interpretado por Justin Baldoni, en medio del resurgimiento de su primer amor, Atlas Corrigan, representado por Brandon Sklenar. Slate interpreta el papel de Allysa Kincaid, la mejor amiga de Lily y hermana de Ryle.
Deadpool y Wolverine
Lively ha mantenido una trayectoria destacada en Hollywood. Recientemente, la actriz y sus hijos tuvieron apariciones especiales en la película “Deadpool y Wolverine”, protagonizada por Ryan Reynolds.
Su hija Betty Reynolds, de cuatro años, tuvo un papel especial acreditado como “Hugh Jackman Wrangler” en los créditos finales de la película de Marvel Studios. Durante el estreno en el David H. Koch Theatre de Nueva York, Reynolds y Hugh Jackman discutieron la experiencia de tener a sus hijos en el set.
El interés de la familia Reynolds-Lively no se limitó a Betty, ya que sus otros hijos también participaron en la película. Inez, de siete años, interpretó a Kidpool, mientras que James, de nueve años, hizo el papel de un mutante gritón. El más joven, Olin, de un año, fue acreditado como Babypool. Reynolds afirmó que su hija Betty muestra un afecto peculiar por Jackman.
La participación familiar en la producción fue un tema central en el estreno. Reynolds compartió un video emotivo en Instagram, donde habló sobre su hijo Olin y su conexión con John Bell, fundador de la organización de caridad “Walking 4 Hope”. Además, la cantante Taylor Swift mostró su apoyo al proyecto en Instagram, elogiando el trabajo de Reynolds y describiendo la película como su mejor obra hasta la fecha.