La disputa legal entre Justin Baldoni y Blake Lively continúa escalando, involucrando ahora a figuras clave de la industria del entretenimiento como Kevin Feige, presidente de Marvel, y Bob Iger, CEO de Disney. La controversia, originada por acusaciones cruzadas de acoso y difamación, se ha intensificado aún más con la inclusión de un personaje de la película Deadpool & Wolverine. La situación ha generado una serie de demandas, cartas legales y comentarios en los medios, y amenaza con convertirse en uno de los escándalos más mediáticos de la industria en los próximos meses.
La solicitud legal de Justin Baldoni a Marvel y Disney
El 7 de enero, el abogado de Justin Baldoni, Bryan Freedman, envió una carta de preservación legal a Kevin Feige y Bob Iger, exigiendo que se conserven todos los documentos relacionados con el desarrollo del personaje «Nicepool», interpretado por Ryan Reynolds en la película Deadpool & Wolverine. La carta hace un llamado a Disney y Marvel para que resguarden “todos y cada uno de los documentos relacionados con el desarrollo, la escritura y la filmación de historias y escenas” que involucran a este personaje.
La controversia surgió en el contexto de acusaciones de acoso sexual y difamación presentadas por Blake Lively contra Justin Baldoni, quien trabajó con ella en el rodaje de It Ends With Us. Según el equipo legal de Baldoni, el personaje de «Nicepool» contiene referencias y comentarios misóginos que aluden directamente a las acusaciones de la actriz, lo que ha generado un conflicto legal que involucra tanto a los actores como a los estudios de cine.
El personaje de Nicepool y las implicaciones legales
En Deadpool & Wolverine, Ryan Reynolds interpreta al personaje «Nicepool», quien se caracteriza por realizar comentarios misóginos y referencias que, según los abogados de Baldoni, aluden a los incidentes descritos por Lively en su queja ante el Departamento de Derechos Civiles de California. Estas acusaciones apuntan a que Baldoni cometió acoso sexual y humillación postparto durante el rodaje de la película It Ends With Us.
El equipo legal de Baldoni sostiene que la creación y desarrollo de este personaje puede ser parte de un intento deliberado de ridiculizar y acosar a Baldoni a través de la película. En este sentido, se ha solicitado a Disney y Marvel que conserven toda la documentación relacionada con el personaje, sus características y las interacciones en torno a su desarrollo.
Créditos: Escena de Deadpool & Wolverine
La demanda contra The New York Times y los nuevos frentes legales
La disputa entre Baldoni y Lively también se ha extendido a los medios de comunicación. Justin Baldoni presentó una demanda contra The New York Times por difundir información tergiversada relacionada con las acusaciones de acoso de Blake Lively. Según la demanda, el artículo publicado por el medio de comunicación distorsionaba los hechos y perjudicaba la imagen de Baldoni.
Además, Baldoni y su abogado Bryan Freedman han insinuado que podrían demandar a Ryan Reynolds y su esposa Blake Lively por interferencia contractual y extorsión civil. En la carta legal enviada a Marvel y Disney, se hizo mención de la posibilidad de que Lively hubiera utilizado su influencia en Deadpool & Wolverine para incluir elementos que reflejaran el conflicto con Baldoni. Un detalle curioso es que el personaje de «Nicepool» está acreditado como «Gordon Reynolds», un nombre que Lively agradeció en los créditos de It Ends With Us, lo que ha levantado sospechas sobre la conexión entre ambos casos.
Las consecuencias profesionales para Justin Baldoni
A raíz de la disputa legal, Justin Baldoni ha enfrentado repercusiones profesionales. Recientemente, fue despedido de la agencia WME, que también representa a Blake Lively y Ryan Reynolds. Este despido ha sido interpretado como una consecuencia directa de su enfrentamiento legal con la pareja de actores, lo que pone en evidencia cómo las disputas personales pueden influir en las carreras profesionales dentro de la industria del entretenimiento.
Por otro lado, aunque Marvel y Disney han declinado hacer comentarios sobre el asunto, el abogado de Baldoni ha asegurado que el caso avanzará en los tribunales. En este sentido, se espera un enfrentamiento prolongado que podría tener implicaciones no solo para los involucrados, sino también para las dinámicas laborales y personales dentro de la industria del cine.
La postura de Bryan Freedman sobre la disputa
Bryan Freedman, el abogado de Justin Baldoni, ha comentado públicamente que la demanda busca exponer un sistema en el que los individuos poderosos en la industria del entretenimiento perpetúan un ciclo de miedo y destrucción. Según Freedman, las demandas confrontarán directamente este sistema, asegurando que “ningún individuo o entidad, sin importar cuán influyente sea, pueda continuar con este ciclo”. El abogado ha destacado que la verdad saldrá a la luz, lo que podría cambiar la percepción pública sobre los involucrados.
Además, Freedman ha mencionado que los medios de comunicación tradicionales también tienen un papel en la distorsión de la verdad, utilizando sus plataformas para manipular la información y dañar la reputación de las personas sin rendir cuentas. Con su demanda, Baldoni busca exponer las tácticas utilizadas por los medios para destruir vidas y vidas profesionales sin consecuencias.
Las acusaciones previas de Blake Lively
En su defensa, Bryan Freedman también señaló que existe un patrón de amenazas y acoso por parte de Blake Lively, quien, según el abogado, ha utilizado intermediarios para comunicar amenazas a lo largo de los años. Freedman asegura tener pruebas y mensajes que respaldan estas acusaciones, lo que añade un nuevo giro a la disputa y plantea serias dudas sobre el comportamiento de la actriz a lo largo de su carrera.