El conflicto legal entre los actores de Romper el círculo, Justin Baldoni y Blake Lively, ha dado un giro inesperado, intensificando la disputa con acusaciones cruzadas que involucran acoso sexual y campañas de difamación. El pasado 3 de enero, el abogado de Baldoni, Bryan Freedman, reveló que su cliente planea demandar a Lively en respuesta a las acusaciones de acoso sexual formuladas por la actriz. Este es solo uno de los muchos capítulos que han marcado una de las disputas legales más mediáticas de Hollywood en los últimos tiempos.
Acusaciones de acoso sexual de Blake Lively contra Justin Baldoni
La disputa comenzó a finales de diciembre de 2024, cuando Blake Lively presentó una denuncia formal contra Justin Baldoni, acusándolo de acoso sexual durante la filmación de Romper el círculo (en inglés, It Ends with Us), película que ambos protagonizan. Según los documentos presentados al Departamento de Derechos Civiles de California, Lively detalló una serie de incidentes en los que Baldoni, supuestamente, mostró imágenes explícitas y videos de contenido sexual, le habló sobre su vida íntima y trató de añadir escenas de índole sexual al guion sin el consentimiento de Lively.
La actriz acusó además a Baldoni y a su equipo de relaciones públicas de manipular las redes sociales y trabajar con los medios para destruir su reputación. En su declaración a The New York Times, Lively explicó que la demanda tenía como objetivo “levantar el velo sobre estas tácticas de represalia” y proteger a otras personas que pudieran ser objeto de abusos similares en la industria.
(EFE/ Sony Pictures)
El enfrentamiento legal con Justin Baldoni
El abogado de Baldoni, Bryan Freedman, respondió rápidamente a las acusaciones y confirmó que su cliente planeaba interponer una demanda contra Lively. «Absolutamente… sí», respondió Freedman cuando se le preguntó si Baldoni tenía intención de demandar a Lively. «La estamos preparando». Además, Freedman aseguró que Baldoni está dispuesto a hacer públicos todos los mensajes de texto y conversaciones intercambiadas entre ambos actores durante y después del rodaje, como prueba de su inocencia. «Queremos que haya acceso a las pruebas. Que la gente lo vea y determine la verdad por sí misma», sentenció.
La demanda por difamación de Justin Baldoni
En respuesta a las acusaciones de Blake Lively, Justin Baldoni presentó una demanda por difamación contra The New York Times el 31 de diciembre de 2024, después de que el periódico publicara un artículo titulado “We Can Bury Anyone: Inside a Hollywood Smear Machine” (“Podemos enterrar a quien sea: Detrás de una maquinaria de desprestigio en Hollywood”). En el artículo, el periódico afirmaba que Baldoni había orquestado una campaña para difamar a Lively con la ayuda de su equipo de relaciones públicas.
El abogado de Baldoni calificó el artículo como “mentiroso y tendencioso”, acusando al periódico de alterar y editar selectivamente los mensajes de texto entre los miembros del equipo de relaciones públicas de Baldoni. Según Freedman, los mensajes fueron sacados de contexto con el fin de crear una narrativa que perjudicara la imagen de Baldoni. La demanda busca una compensación de 250 millones de dólares y alega que el artículo fue diseñado estratégicamente para destruir la reputación del actor.
Uno de los mensajes de texto presentados en la demanda muestra una conversación entre Lively y Baldoni, en la que Blake aparentemente invita a Justin a su tráiler para practicar sus líneas y revisar el guion mientras ella estaba “sacándose leche”. Este detalle contradice la queja de Lively, quien había alegado previamente que Baldoni irrumpió en su camerino sin su consentimiento.
El respaldo de Blake Lively y su expansión de la demanda
El 31 de diciembre de 2024, además de la demanda de Baldoni contra The New York Times, Blake Lively presentó una nueva demanda formal en un tribunal federal de Nueva York. Esta demanda amplió las acusaciones iniciales y agregó a Wayfarer Studios, la compañía de producción de Baldoni, su CEO Jamey Heath, y las relaciones públicas Jennifer Abel y Melissa Nathan como demandados. Lively argumentó que el comportamiento de Baldoni y su equipo no solo le causó daño emocional, sino que también la dejó en una situación de vulnerabilidad laboral y personal.
El abogado de Lively dejó en claro que esta nueva demanda no cambia en absoluto las acusaciones previas presentadas ante el Departamento de Derechos Civiles de California. «Esperamos responder a todos los alegatos de Wayfarer en la corte», aseguró.
(Nils Meilvang/Ritzau Scanpix/via REUTERS)
Los mensajes de texto presentados por la defensa de Baldoni
Uno de los puntos clave de la defensa de Baldoni ha sido la publicación de varios mensajes de texto entre los actores. Estos mensajes aparentemente contradicen las acusaciones de Lively, en particular sus alegatos de que Baldoni había invadido su privacidad al irrumpir en su camerino. En uno de los mensajes, Lively invita a Baldoni a su tráiler para ensayar, lo que pone en duda las alegaciones de Lively de que Baldoni había actuado inapropiadamente en su contra.
La publicación de estos mensajes de texto, que según la defensa fueron manipulados en el artículo de The New York Times, ha generado controversia y ha sido uno de los puntos más debatidos en este conflicto legal. Según Freedman, los textos fueron «sacados de contexto» con el objetivo de dañar la imagen de Baldoni y desvirtuar la relación profesional entre ambos actores.
Respaldo de los compañeros de Lively y la industria de Hollywood
Blake Lively ha recibido el apoyo público de varios de sus compañeros de la industria, entre ellos el director Paul Feig, conocido por sus trabajos en A Simple Favor, y sus coestrellas de The Sisterhood of the Traveling Pants. Estos actores han expresado su solidaridad con Lively y han condenado el comportamiento de Baldoni, apoyando la postura de la actriz en este conflicto legal.
Además, Lively ha logrado captar el apoyo de muchos otros dentro de la industria de Hollywood, quienes consideran que sus acusaciones son un reflejo de los problemas más amplios que existen en la industria del cine con respecto al abuso de poder y la falta de protección para las mujeres.
(Crédito: Columbia Pictures)
La batalla judicial continúa
El enfrentamiento legal entre Justin Baldoni y Blake Lively parece que no tiene fin a la vista. Las demandas por acoso sexual, difamación y la manipulación de mensajes de texto continúan alimentando los titulares, mientras ambos actores y sus equipos legales se preparan para una larga batalla en los tribunales. La disputa ha captado la atención de los medios y del público, quienes siguen de cerca cada desarrollo en este complejo caso.
Este conflicto subraya las tensiones que persisten en la industria del cine y la televisión, donde las acusaciones de abuso de poder, acoso sexual y difamación son cuestiones delicadas que siguen siendo tema de debate público. La resolución de este caso podría tener un impacto significativo en cómo se manejan las acusaciones en el futuro dentro de Hollywood, especialmente en un momento en que la industria está bajo un escrutinio creciente por sus prácticas en torno a la equidad, el respeto y el trato hacia las mujeres.