«Me siento completamente desolada y devastada». Con estas palabras, Jennifer Lopez anunciaba la cancelación de su gira This Is Me… Live, esa que preparó con tanto esfuerzo y empeño durante meses junto a su equipo.
Ha prometido a su público que se lo compensará, pero que ahora necesita tiempo en familia y junto a sus seres queridos. En el mismo día que se dio a conocer la noticia, la cantante era captada con su todavía esposo, Ben Affleck, con quien los rumores de separación son cada vez más fuertes.
Los actores fueron captados juntos, pero no felices. Ni siquiera el alegre motivo que les unía, dio lugar a una sonrisa cómplice. O al menos de cara a los fotógrafos.
Una Jennifer muy triste, seria y cabizbaja se dejaba ver junto a Ben para asistir a la graduación de Violet, la hija del también director.
Independientemente de su relación como matrimonio, una fuente cercana a PEOPLE asegura que la prioridad de ambos son sus hijos y que la buena relación con ellos permanezca, pase lo que pase.
«Quieren poner a sus hijos por delante», ha revelado este allegado a nuestra revista hermana. «La graduación era algo muy significativo. Jennifer quería celebrarlo», prosigue. Parece que ambos han dejado a un lado sus posibles diferencias, para compartir con la joven este día, pero sus caras reflejan que atraviesan una etapa complicada.