Sean «Diddy» Combs fue acusado de agresión sexual en una nueva demanda presentada este martes por Crystal McKinney, una exmodelo y ganadora del programa de concursos Misión Modelo de MTV en 1998.
Según la demanda, presentada en Nueva York y obtenida por CNN, McKinney afirma que fue «drogada y agredida sexualmente» en 2003 por Combs tras un evento de la Semana de la Moda Masculina en Nueva York.
McKinney, que entonces tenía 22 años, conoció a Combs en una cena, donde él se le insinuó «sexualmente» y le dijo que le llamara más tarde, según la denuncia. McKinney «se sintió confundida pero esperanzada de que Combs cumpliera sus promesas de ayudarla en su carrera», y Combs la invitó a su estudio de grabación esa misma noche, continúa la denuncia.
En el estudio, Combs ofreció a McKinney marihuana, que según ella estaba «mezclada» con «un narcótico u otra sustancia intoxicante». La denuncia alega que Combs vio que McKinney estaba «muy intoxicada» y le exigió que le siguiera mientras la «conducía físicamente» al cuarto de baño.
En el baño, Combs «comenzó a besarla sin su consentimiento» y más tarde «la obligó a practicarle sexo oral», según la denuncia.
Después de la agresión, McKinney afirma que se sintió «cada vez más mareada y luego perdió el conocimiento», despertándose más tarde en un taxi que se dirigía al apartamento del diseñador con el que trabajaba en ese momento. «Cuando recobró el conocimiento, la demandante se dio cuenta de que había sido agredida sexualmente por Combs», dice la denuncia.
CNN se ha puesto en contacto con los representantes de Combs y McKinney para que hagan comentarios, así como con los representantes de Bad Boy Records, Sean John Clothing LLC y Universal Music Group Inc, entidades que también fueron citadas como demandadas.
McKinney interpuso la demanda por violación bajo la Ley de Protección de las Víctimas de Violencia de Género de Nueva York.
Según el Ayuntamiento de Nueva York, la ley da «a los supervivientes de actos de violencia por motivos de género más tiempo para emprender acciones civiles ampliando el plazo de prescripción» y también «se aplica a tales actos cometidos por partes que dirijan, permitan, participen o conspiren en un acto de violencia por motivos de género».
McKinney fue la ganadora de Misión Modelo de la MTV en 1998 y consiguió un contrato de modelo con IMG. Se convirtió en un rostro conocido en varios programas de MTV y participó en una campaña de moda para el diseñador Tommy Hilfiger.
Como consecuencia del incidente, McKinney cayó en una «depresión severa» y «experimentó adicción al alcohol y a las drogas» mientras intentaba sobrellevar la situación, según la demanda. A día de hoy, según la demanda, McKinney sigue padeciendo problemas de salud mental derivados de la supuesta agresión y desde entonces ha dejado de trabajar como modelo.
McKinney reclama una cantidad indeterminada en concepto de daños punitivos y compensatorios.