Cámara Baja desestima proyecto que financiaba Gobierno a cambio de prueba de ciudadanía a votantes. Se desconoce los próximos pasos para obtener fondos.
La Cámara de Representantes de Estados Unidos rechazó un plan promovido por el presidente de la institución, el republicano Mike Johnson, para financiar al Gobierno durante seis meses y evitar un cierre administrativo a finales de mes por falta de fondos.
Aunque los republicanos tienen mayoría en la Cámara Baja, catorce congresistas de ese partido se sumaron a la bancada demócrata y votaron en contra del proyecto provocando que éste fracasara, con 220 votos en contra y 202 a favor.
Johnson había mezclado en un mismo paquete legislativo la financiación de seis meses del Ejecutivo con una ley para exigir una prueba de ciudadanía a quienes deseen votar en las elecciones presidenciales del 5 de noviembre.
Los republicanos difunden desde hace meses la idea de que miles de personas indocumentadas votarán en los comicios, a pesar de que es ilegal emitir el sufragio sin ser ciudadano y no hay evidencia de que este vaya a ser un problema en las elecciones.
Aunque el candidato y líder de los republicanos, el expresidente Donald Trump (2017-2021), apoyó el plan de Johnson, un grupo heterogéneo de congresistas, formado tanto por miembros del ala dura como conservadores moderados, votó en contra.
El proyecto también fue rechazado por la Casa Blanca y por los demócratas, que quieren que la extensión de fondos para el Gobierno dure solo hasta diciembre para poder negociar en invierno unos nuevos presupuestos antes de la investidura del próximo presidente.
Si los legisladores no logran ponerse de acuerdo antes del 30 de septiembre, el Gobierno federal deberá cerrar a poco más de un mes de las elecciones.
La composición del Congreso actual, donde los republicanos controlan la mayoría de la Cámara de Representantes y los demócratas el Senado, fuerza a los legisladores a llegar a acuerdos para poder pasar cualquier tipo de legislación.
La legislación financiaría a las agencias en general en los niveles actuales hasta el 28 de marzo, mientras los legisladores resuelven sus diferencias en un acuerdo de gasto para todo el año. Los demócratas, y algunos republicanos, están presionando para una extensión más corta. Una solución temporal permitiría al Congreso actual elaborar un proyecto de ley final después de las elecciones y llevarlo al escritorio del presidente demócrata, Joe Biden, para su firma.
Desde 1976, la Administración se ha quedado sin fondos en unas 20 ocasiones, aunque la mayoría de veces ha sido solo durante un día. El cierre más largo, de 35 días, ocurrió bajo la Presidencia de Trump por unos desacuerdos sobre los fondos para el muro que quería alzar en la frontera con México.
BUSCAN PLAN BIPARTIDISTA
Los demócratas de la Cámara de Representantes dijeron que el mandato de prueba de ciudadanía no debería ser parte de la resolución continua para mantener al Gobierno financiado e instaron a Johnson a trabajar con ellos en un proyecto de ley que pueda aprobarse en ambas cámaras.
“Esto no se va a convertir en ley”, dijo el representante Pete Aguilar, demócrata por California. “Esto es teatro republicano que tiene como objetivo apaciguar a los miembros más extremistas de su conferencia, mostrarles que están trabajando en algo y que siguen apoyando al expresidente de Estados Unidos en su intento de demonizar a los inmigrantes”.
El líder de la mayoría del Senado, Chuck Schumer, demócrata por Nueva York, comentó que el esfuerzo de Johnson estaba condenado al fracaso. “Lo único que logrará es dejar en claro que se está encontrando con un callejón sin salida”, dijo Schumer. “En cambio, debemos tener un plan bipartidista”.