Donald Trump avanza en el diseño de su Gabinete para proyecto MAGA. John Ratcliffe, como jefe de la CIA, y presentador Pete Hegseth, como secretario de Defensa, son algunos confirmados. Además, Elon Musk integrará Departamento de Eficiencia Gubernamental.
El gabinete trumpista se llena de nuevos rostros y viejos aliados. El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, ha comenzado a revelar la plantilla de fichajes que encabezarán varios de los Departamentos del Gobierno estadounidense durante su segundo periodo presidencial.
Trump ha culminado el día de presentaciones con tres nombres cruciales para su próximo Gobierno: por un lado, confirmó la nominación de Pete Hegseth, presentador de televisión y veterano en Irak y Afganistán, como el próximo secretario de Defensa. Hegseth es un feroz defensor del magnate neoyorquino en televisión, además de ser un difusor de teorías de la conspiración conservadoras.
«Pete es duro, inteligente y un verdadero creyente en ‘America First’. Con Pete al timón, los enemigos de Estados Unidos están sobre aviso: nuestras Fuerzas Armadas volverán a ser grandes y Estados Unidos nunca retrocederá…», escribió Trump en la publicación anunciando a Hegseth, en TruthSocial.
Por otro lado, el republicano presentó a su nuevo director de la Agencia Central de Inteligencia (CIA). John Ratcliffe, antiguo legislador texano y director de Inteligencia Nacional durante la primera Presidencia de Trump, es la apuesta como próximo jefe de la CIA.
Como congresista, Ratcliffe apoyó las investigaciones contra el hijo de Joe Biden, Hunter Biden, además de criticar las querellas en contra de los presuntos vínculos entre Rusia y la campaña de Trump durante las elecciones de 2016.
Trump también confirmó lo que se había anunciado en campaña meses antes de su elección: Elon Musk tendrá un puesto en la Administración.
El magnate de origen sudafricano hará dupla con el ex precandidato republicano a la Presidencia Vivek Ramaswamy para liderar el nuevo ‘Departamento de Eficiencia Gubernamental’ (DOGE), una nueva rama dentro de la Administración de Trump que se encargará de impulsar recortes en el gasto público, la desregularización de la economía y «reestructurar» agencias gubernamentales, de acuerdo a palabras del republicano.
Pete Hogseth, de la televisión al Pentágono
Pete Hogseth, veterano de guerra y graduado de la Universidad de Princeton, es un presentador de televisión en el programa ‘Fox & Friends’ de la cadena estadounidense conservadora, en donde ha defendido en múltiples ocasiones a Trump, especialmente durante su primer mandato, subrayando su agenda ‘America First’ y siendo afín a la retirada de tropas en múltiples puntos del orbe, incluyendo el Medio Oriente.
Además, el nuevo nominado para liderar el Pentágono ha publicado una serie de libros, incluyendo «La guerra contra los guerreros: detrás de la traición a los hombres que nos mantienen libres», en donde ha criticado a la «élite» de la política estadounidense, además de defender una reestructuración en el Ejército estadounidense que, para Hogseth, está controlado por «la izquierda».
«Nuestras ‘élites’ son como los irresponsables hombres de negocios drogadictos del Nakatomi Plaza, que miran con desprecio al John McClane de Bruce Willis en ‘Jungla de Cristal'», escribió Hogseth en su libro publicado apenas el pasado mes de junio.
Aunque es un veterano de guerra, Hogseth no tiene experiencia en la dirigencia de la empresa castrense estadounidense ni en puestos de inteligencia, sin embargo, el presentador de televisión también ha sido un ávido defensor de miembros del Ejército acusados de crímenes de guerra. En 2019, Hogseth le pidió a Trump en televisión que perdonara a los activos militares acusados por dichas violaciones.
La nueva e inusual apuesta trumpista para liderar el departamento de Defensa de la primera potencia militar en el mundo llega en uno de los momentos geopolíticamente más convulsos de la modernidad: la brutal ofensiva militar de Israel en Gaza y Líbano, aunada a la respuesta militar de grupos como Hezbolá y la influencia regional creciente de Irán; la guerra en Ucrania y las tensiones entre China y Taiwán, como algunos de los conflictos activos más relevantes.
John Ratcliffe, un viejo aliado de Trump a liderar la CIA
La nominación trumpista para la nueva jefatura de la CIA completa el intento del republicano por llenar su próxima administración de figuras leales que defiendan al nuevo inquilino de la Casa Blanca ante presiones de legisladores demócratas o republicanos no alineados totalmente al magnate neoyorquino.
El nombre de John Ratcliffe no es nuevo para el nuevo presidente electo. De 59 años, Ratcliffe tiene experiencia como congresista por el estado de Texas, además de servir como director de inteligencia nacional durante el primer periodo presidencial de Trump, lo que lo dota de un nivel de experiencia importante para convencer al Senado de confirmarlo en el puesto.
La confianza del Senado en el jefe de la CIA es fundamental para que una nominación presidencial prospere. En 2019, el mismo Ratcliffe declinó su postulación en el puesto de inteligencia nacional después de que los congresistas cuestionaron su objetividad, aunque meses después, terminó por seducir a la cámara alta para confirmar el puesto que Trump le había concedido en la dirigencia.
Aunque podría ser descrito como uno de los leales a Trump, Ratcliffe convence dentro de la esfera bipartidista por su tendencia a no ceder a cualquier demanda del nuevo presidente electo. En 2020, Ratcliffe alertó sobre el peligro de la interferencia china en las elecciones de 2020, aunque también reconoció intentos injerencistas por parte de Rusia, especialmente con el objetivo de afectar la percepción estadounidense sobre Joe Biden.
Durante su período en la Cámara de Representantes, Ratcliffe atacó duramente el juicio político en contra de Donald Trump impulsado por la bancada demócrata en 2019. «Este es el juicio político más delgado, rápido y débil que nuestro país haya visto jamás,», dijo el entonces representante texano.
Además, el nuevo jefe de la CIA es conocido por su especial fijación en China, siendo una de las primeras voces en advertir sobre la presunta amenaza que Beijing representa para el mundo occidental, y criticando el «doble rasero» que existe dentro de la inteligencia estadounidense al medir los intentos de espionaje de Rusia o Irán en comparación a lo de China.
Elon Musk y Vivek Ramaswamy encuentran su lugar en la nueva administración trumpista
Por otro lado, Trump también cumple con su promesa con los millonarios. Después de meses de campaña en mítines a favor del republicano, Elon Musk tiene un asiento confirmado en la próxima administración trumpista, y será liderando el Departamento de Eficiencia Gubernamental – DOGE, una nueva rama gubernamental que tiene como objetivo esencial desregularizar la economía estadounidense y la estructura estatal del país.
«Esto enviará ondas de choque a través del sistema, y a cualquiera involucrado en el despilfarro gubernamental, ¡que es mucha gente!», dijo Musk, según fue citado en el comunicado en donde Trump lo anunciaba, junto a Ramaswamy, como las nuevas cabezas de este embrionario departamento.
Sobre la naturaleza de esta extraña y novedosa rama de la Casa Blanca, Trump explicó que el nuevo departamento «proporcionará asesoramiento y orientación desde fuera del gobierno», revelando que las labores del mismo solo tendrán poco más de un año de duración, terminando el 4 de julio de 2026.
Musk ha invertido millones de dólares en la campaña trumpista desde que anunciara su apoyo oficialmente por el republicano, impulsando una agenda a su favor a través de X, antes conocido como Twitter, red social de la que es propietario. El hombre más rico del mundo ha reconocido que favorecerá a su propia industria en el Gobierno, abogando por la desregularización en la aprobación de vehículos autónomos.
Por su parte, Ramaswamy es otro millonario en la bolsa trumpista. Propietario de una empresa farmacéutica e hijo de padres inmigrantes indios, Ramaswamy entró al imaginario político estadounidense al ser uno de los precandidatos republicanos a la Presidencia que rivalizaron con Trump el año pasado, aunque después de retirar su candidatura, el magnate farmacéutico expresó su apoyo total al neoyorquino.
Los multimillonarios Ramaswamy y Musk forman parte de un ‘roster’ trumpista repleto de figuras leales, aunque sin mucha experiencia, que prometen hacer realidad la narrativa conservadora, anti-estado y hostil en el ámbito geopolítico que llevó a Trump a la Casa Blanca por segunda vez.
Más nombres
También nombró a su asesor de larga data, Stephen Miller, conocido por su postura estricta en temas de migración, como subdirector de política en su nueva administración.
Miller fue asesor senior en el primer mandato de Trump y ha sido una figura central en muchas de sus decisiones políticas, notablemente la decisión de su gobierno de separar a miles de familias migrantes como estrategia de disuasión en 2018.
Ayudó a elaborar muchos de los discursos y planes más radicales de Trump sobre migración, y a menudo fue el rostro público de esas políticas durante el primer mandato del mandatario republicano y durante sus campañas.
Asimismo, el empresario ha elegido a la gobernadora de Dakota del Sur, Kristi Noem, como próxima secretaria del Departamento de Seguridad Nacional, según ha informado CNN citando a dos fuentes.
Noem, considerada en su día como posible compañera de fórmula del republicano Trump, cumple actualmente su segundo mandato de cuatro años como gobernadora de Dakota del Sur tras una aplastante victoria en la reelección en 2022. Ella saltó a la fama nacional después de negarse a imponer la obligación del uso de mascarilla en todo el estado durante la pandemia del covid-19.
Sin embargo, Noem ha tenido unos meses políticamente turbulentos este año.
Además, el magnate eligió al ex gobernador de Arkansas, Mike Huckabee, como embajador de Estados Unidos en Israel. Él «ama a Israel y al pueblo de Israel, y del mismo modo, el pueblo de Israel lo ama a él», afirmó el presidente electo en un comunicado.
También, nombró a la representante republicana Elise Stefanik como su elegida para ser embajadora ante la ONU.
“Es un honor para mí nominar a la congresista Elise Stefanik para que se desempeñe en mi gabinete como embajadora de Estados Unidos ante las Naciones Unidas. Elise es una luchadora increíblemente fuerte, tenaz e inteligente que defiende el principio de ‘Estados Unidos’”, señaló Trump en un comunicado. La congresista de Nueva York, la cuarta republicana de mayor rango en la Cámara de Representantes, ha sido una fuerte aliada del presidente electo y una importante recaudadora de fondos para el Partido Republicano.
Asimismo, es convocado el empresario y filántropo Steve Witkoff, uno de sus amigos más cercanos, como su futuro enviado especial para Oriente Medio.
Según puntualizó Witkoff «es un líder muy respetado en los negocios y la filantropía, que ha hecho que cada proyecto y comunidad en el que ha estado involucrado sea más fuerte y próspero».
También, el veterano abogado republicano Bill McGinley servirá como asesor legal de la Casa Blanca, anunció el presidente electo.
«Bill es un abogado inteligente y tenaz que me ayudará a avanzar en nuestra agenda de Estados Unidos Primero mientras lucha por la integridad electoral y contra la instrumentalización de las fuerzas del orden», mencionó Trump.
McGinley se desempeñó como secretario del gabinete de la Casa Blanca durante el primer Gobierno de Trump, y durante esta elección sirvió como asesor externo de «integridad electoral» de la Convención Nacional Republicana.
Es un abogado político de larga data y bien conocido, habiendo sido anteriormente socio en dos de los bufetes de abogados más poderosos de la ciudad de Washington, capital de EE.UU., la antigua potencia de cabildeo Patton Boggs y el gigante de inclinación conservadora Jones Day. Ha trabajado como abogado para el Partido Republicano durante años, y su firma actual tiene un grupo más pequeño, pero bien respetado, de abogados políticos.