Donald Trump anuncia creación de oficina de recaudación de aranceles. México, Canadá y China incluidos en planes económicos de presidente electo.
El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, anunció la creación de una entidad especializada para la recolección de aranceles, lo que constituye la última evidencia de que el republicano busca cumplir sus compromisos de establecer impuestos comerciales cuando retome su posición.
El anuncio, publicado en sus redes sociales, forma parte de la estrategia de Trump de incrementar los aranceles a aliados y adversarios a los que intenta ejercer presión para que adopten acciones en asuntos tan diversos como la inmigración y el tráfico de drogas en las fronteras.
“Crearé el SERVICIO DE INGRESOS EXTERNOS para recaudar nuestros aranceles, obligaciones y todos los ingresos que provengan de fuentes extranjeras”, afirmó Trump en un post en su plataforma social Truth Social.
“Comenzaremos a cobrarles a quienes ganan dinero a costa nuestra con el comercio, y ellos comenzarán a pagar, FINALMENTE, su parte justa. El 20 de enero de 2025 será la fecha de nacimiento del Servicio de Impuestos Externos”, agregó.
México y Canadá, aliados de Estados Unidos en el tratado de libre comercio de América del Norte (T-MEC), junto con China, competidor comercial y económico de Washington, figuran en los planes del millonario republicano.
Trump también ha amenazado con un incremento general de tarifas aduaneras, junto con tarifas más elevadas para todos los productos que China importa.
El nuevo ente autorizaría «recaudar nuestros aranceles» y «todos los ingresos que provengan de fuentes externas».
Sin embargo, el presidente electo no reveló detalles acerca de si tenía la intención de establecer una nueva entidad gubernamental o si su propuesta era en su mayoría un ejercicio de branding para las funciones actuales del gobierno. Una reestructuración necesitaría una legislación del Congreso. Los demócratas pusieron en duda la propuesta.
«External Revenue Service» es un término que hace referencia al «Internal Revenue Service» o IRS, la entidad encargada de la recolección de impuestos en Estados Unidos, que está bajo la jurisdicción del Departamento del Tesoro.
A pesar de que el mandatario argumenta que países como China asumirán el costo de esta política, la verdad es que los impuestos se recaudan a través de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza, cuyos empleados examinan los documentos, llevan a cabo auditorías y cobran tributos y multas, para después depositar el dinero en el Fondo General del Departamento del Tesoro. Son menos del 2% de los ingresos del gobierno federal.
No obstante, el ejercicio resalta la intención de Trump de establecer aranceles a las importaciones foráneas como un medio para compensar los gastos de su agenda política que, de otra forma, serían asumidos directamente por los contribuyentes.
Trump fue elegido con la promesa de imponer aranceles a aliados y adversarios, representándolos como instrumentos para incrementar los ingresos de Estados Unidos y forzar a las compañías a recuperar puestos de trabajo en el sector manufacturero, además de equilibrar el déficit en aumento.
Algunos analistas sostienen que el costo de estas acciones podría acabar repartiendo entre los consumidores, quienes podrían pagar precios más elevados por productos de consumo final (intensificando así la inquietud pública por la inflación), desviaría o disminuiría los flujos de comercio y no producirían los ingresos que el presidente electo había pronosticado.
Si bien Trump obtuvo el apoyo de muchos ejecutivos de Wall Street y líderes corporativos, la incertidumbre sobre sus planes de imponer aranceles ha sacudido a los mercados y a la comunidad empresarial.
Los integrantes del equipo emergente de Trump han debatido sobre un incremento progresivo de los aranceles mensuales, una estrategia diseñada para potenciar su impacto en las conversaciones con otras naciones, evitando simultáneamente un resurgimiento de la inflación, de acuerdo con individuos conocedores del tema.
En el transcurso de su campaña, Trump planteó tarifas mínimas del 10% al 20% para todos los productos importados, y del 60% o superior para los envíos provenientes de China. En noviembre, también comprometió aplicar impuestos adicionales a Canadá, México y China si estos países no intensificaban sus esfuerzos para salvaguardar las fronteras de Estados Unidos y prevenir el ingreso de inmigrantes indocumentados y consumidores de drogas ilegales.
Trump también reprochó las iniciativas anteriores de Estados Unidos para alcanzar pactos de libre comercio, a los que denominó como «livianos y patéticamente débiles».
Pese a que Estados Unidos ha empleado durante décadas los tratados de libre comercio para establecer vínculos con otras naciones a nivel global, recientemente ha abandonado dicha política, incluyendo durante la administración de Joe Biden.
Aranceles de Trump podrían destruir empleos
Los aranceles del 25% que ha impuesto el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, a Canadá podrían arruinar hasta 500.000 puestos de trabajo en la provincia de Ontario, la más industrial del país, según afirmó el líder del Gobierno provincial, Doug Ford.
«Estos aranceles afectarán a todas y cada una de las personas. No va a ser bueno», señaló en una rueda de prensa.
El líder del Gobierno de Ontario agregó que la cantidad definitiva de empleos eliminados estará determinada por el porcentaje de los aranceles y los sectores en los que se implementarán, sin embargo, los datos que su gabinete gestiona podrían ascender al medio millón.
Además, Dominic LeBlanc, el ministro de Finanzas de Canadá, que se reunió con Ford para discutir las consecuencias de los aranceles previstos, sostuvo que el Gobierno de Canadá está preparando represalias comerciales contra los Estados Unidos, incluyendo el embargo de las exportaciones de petróleo.
«La única cosa responsable que el Gobierno nacional puede hacer es reconocer que todas las opciones están sobre la mesa», indicó LeBlanc al ser cuestionado acerca del potencial embargo de petróleo.
«Queremos ver cuáles son las acciones de EE.UU. la próxima semana», agregó. El 20 de enero, Trump asume la presidencia.
Canadá se posiciona como uno de los principales productores de petróleo a nivel global, produciendo 5,3 millones de barriles diarios en 2024. Estados Unidos obtiene casi el 80% de este crudo. La producción del 84% de Canadá se deriva de Alberta.
Recientemente, Danielle Smith, la líder conservadora del Gobierno de Alberta, mantuvo una reunión con Trump en Mar-a-Lago (Florida). Este 13 de enero, Smith amenazó con desencadenar una «crisis de unidad nacional» en Canadá si Ottawa pone en marcha un embargo de petróleo contra los Estados Unidos como respuesta a la implementación de tarifas aduaneras.
Por tu parte, Justin Trudeau, primer ministro de Canadá, mantendrá una reunión con su gabinete el 20 de enero, donde podría materializar su amenaza de aplicar aranceles del 25% a Estados Unidos y a México.
El encuentro de Trudeau con su equipo para evaluar la relación con Estados Unidos frente al arribo de Trump a la Casa Blanca se extenderá durante dos días.
“El Primer Ministro, Justin Trudeau, anunció hoy que llevará a cabo una reunión de gabinete en la región de Outaouais, Quebec, del 20 al 21 de enero de 2025”, informó la oficina del primer ministro.
En el comunicado, el despacho del Primer Ministro de Canadá resaltó que el gabinete salvaguardará y protegerá los intereses de los canadienses frente a las amenazas de tarifas de Trump.
“Nuestro gobierno está firmemente enfocado en proteger y defender los intereses canadienses. Ante la amenaza de aranceles por parte de la administración entrante de los Estados Unidos, el Equipo Canadá utilizará capacidades ampliadas para fortalecer la relación de Canadá con los Estados Unidos, proteger la inversión y los empleos canadienses y dejar en claro de manera inequívoca la relación mutuamente beneficiosa que comparten nuestros dos países”, dijo Trudeau.
Es importante destacar que Trudeau se reunió con Trump el 30 de noviembre en la residencia del presidente candidato en Mar-a-Lago para discutir el asunto de los aranceles.