La Administración del presidente Donald Trump ha solicitado a los gerentes de la Administración Oceanográfica y Atmosférica Nacional (NOAA) que implementen un nuevo recorte de personal de aproximadamente 1.000 trabajadores, lo que podría resultar en la salida de un 20% de la plantilla. Este ajuste tiene el potencial de afectar gravemente la capacidad de la agencia para llevar a cabo sus funciones, como los pronósticos meteorológicos y la gestión de fenómenos como temporales, tormentas y huracanes.
El impacto de los recortes en NOAA: afectaciones en pronósticos y servicios
Según fuentes internas consultadas por The New York Times, esta nueva orden se suma a los 1.300 trabajadores que han dejado la NOAA en las últimas semanas, ya sea por renuncia o despido. Este recorte adicional afectaría a cerca del 20% de los 13.000 empleados que conforman la plantilla de la agencia, la cual depende del Servicio Nacional de Meteorología. Este servicio es esencial no solo para Estados Unidos, sino también para las regiones del Caribe, Pacífico y Atlántico, ofreciendo pronósticos cruciales para la protección de millones de personas.
El recorte de personal en NOAA podría tener repercusiones graves, sobre todo en la capacidad de la agencia para realizar su trabajo en cuanto a monitoreo y pronósticos de fenómenos meteorológicos extremos. Expertos en el tema han expresado su preocupación por las consecuencias que esta reducción de personal podría tener en la precisión de los pronósticos y, por ende, en la preparación ante huracanes y tormentas.
Suspensión de actividades clave debido a la falta de personal en NOAA
Una de las primeras actividades que ya ha sido suspendida debido a la escasez de personal es el lanzamiento de globos sonda, los cuales se utilizan para analizar las capas altas de la atmósfera y obtener datos cruciales para los pronósticos meteorológicos. Esta medida, que se suma a los recortes de personal, subraya la magnitud de la crisis dentro de la agencia.
El Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE), promovido por el magnate Elon Musk, ha impulsado estas iniciativas de recorte en un esfuerzo por reducir la burocracia y los costos federales. Si bien la idea es mejorar la eficiencia del gobierno, expertos y organizaciones del sector están cuestionando si este tipo de recortes en agencias clave como NOAA pueden tener efectos perjudiciales a largo plazo.
Trump y su crítica al presupuesto de NOAA
NOAA, que cuenta con un presupuesto anual de alrededor de 6.800 millones de dólares, ha sido objeto de críticas por parte de la Administración Trump, principalmente por su rol en la alerta sobre el cambio climático y sus consecuencias. El presidente Trump y su entorno han señalado a NOAA como una de las principales agencias que promueven la investigación y las advertencias sobre los efectos del cambio climático, lo que no ha sido bien recibido por algunos sectores del gobierno.
En este contexto, se ha intensificado la presión para reducir el presupuesto y el personal de la agencia. Trump ha calificado a NOAA de «innecesariamente costosa» y ha sugerido que otros sectores del gobierno podrían asumir algunas de las responsabilidades que actualmente recaen en esta agencia.
Organizaciones científicas alertan sobre los peligros de los recortes en NOAA
La medida ha generado preocupación en varias organizaciones científicas, como la Unión Geofísica Americana, que ha instado al Congreso de Estados Unidos a intervenir antes de que los recortes afecten gravemente las capacidades operativas de NOAA. Según los expertos, la reducción de personal no solo afectaría los pronósticos climáticos, sino que también podría limitar la capacidad de la agencia para realizar investigaciones críticas sobre el cambio climático.
Estas alertas se suman a los llamados de activistas y científicos que advierten que reducir la capacidad de NOAA podría ser un error estratégico, especialmente en un contexto global en el que los fenómenos meteorológicos extremos son cada vez más frecuentes y peligrosos.
Recorte de personal en el Departamento de Sanidad de EE. UU.
Además de los recortes en NOAA, otro departamento importante del gobierno estadounidense también está experimentando ajustes significativos. Se conoció recientemente que el Departamento de Sanidad de Estados Unidos (HHS) ha ofrecido una indemnización de 25.000 dólares a sus 80.000 empleados para que abandonen sus puestos de manera voluntaria. Esta medida se enmarca dentro de los esfuerzos más amplios de la Administración Trump por reducir la burocracia federal.
El HHS, dirigido por el escéptico de las vacunas Robert Kennedy Jr., ha sido señalado como uno de los departamentos más afectados por estos recortes. Los empleados que decidan aceptar esta oferta deberán responder antes del próximo viernes. En este caso, la oferta forma parte de una estrategia para reducir los costos operativos del gobierno federal, una medida que, al igual que en NOAA, podría generar críticas y preocupaciones sobre los efectos a largo plazo.