Un tiroteo en el hospital UPMC Memorial, ubicado en York, Pensilvania, dejó el sábado un oficial de policía muerto, según informaron las autoridades locales. El oficial asesinado fue identificado como Andrew Duarte, miembro del Departamento de Policía de West York Borough.
Además de la muerte del oficial, también falleció el pistolero, aunque se informó que no hubo pacientes heridos durante el tiroteo en el hospital, un hecho que generó gran preocupación en la comunidad. Funcionarios del hospital UPMC Memorial confirmaron que la policía gestionaba la situación en el lugar de los hechos.
Detalles sobre el tiroteo en el hospital de Pensilvania
El trágico incidente ocurrió en el hospital UPMC Memorial en York, una ciudad que, con sus aproximadamente 40,000 habitantes, es conocida por la producción de las populares York Peppermint Patties. UPMC Memorial es un hospital de cinco pisos con 104 camas, que abrió sus puertas en 2019.
La vicepresidenta de relaciones públicas del hospital, Susan Manko, informó en un comunicado que el hospital había pedido a los empleados que no estaban programados para trabajar el sábado que se quedaran en casa. También se instruyó a las familias de los pacientes a que se dirigieran al estacionamiento del edificio OSS, ubicado al otro lado de la calle del hospital.
Respuesta del gobierno ante el tiroteo en el hospital
El gobernador de Pensilvania, Josh Shapiro, expresó su preocupación por lo ocurrido y mencionó que se dirigía hacia el hospital tras ser informado del tiroteo. Aseguró que, a pesar de la tragedia, el hospital estaba “seguro”.
Estos eventos trágicos no son aislados. En 2023, un tirador mató a un guardia de seguridad en el hospital psiquiátrico estatal de Nueva Hampshire antes de ser abatido por un oficial estatal. Un año antes, en 2022, un hombre mató a dos trabajadores en un hospital de Dallas mientras presenciaba el nacimiento de su hijo. Ese mismo año, otro hombre abrió fuego en un centro médico de Atlanta, matando a una mujer e hiriendo a cuatro personas, mientras que solo un mes después, en Tulsa, Oklahoma, un pistolero mató a su cirujano y otras tres personas en una oficina médica debido a un conflicto relacionado con un procedimiento quirúrgico.