El domingo pasado, millones de usuarios en Estados Unidos se despertaron con la sorpresa de que no podían acceder a TikTok. Esto fue consecuencia de una nueva ley federal que obligó a las grandes tecnológicas, Apple y Google, a eliminar la popular aplicación de sus tiendas digitales. La medida marca un hito histórico en el ámbito de las redes sociales en el país, ya que nunca antes se había dado una prohibición de este calibre a una plataforma tan influyente.
La plataforma de videos, propiedad de la empresa china ByteDance, informó a través de un comunicado en X (anteriormente Twitter) que estaba «en proceso» de restablecer el servicio para los usuarios estadounidenses. Sin embargo, a medida que transcurrían las horas, la imposibilidad de acceso continuaba, mientras los usuarios se encontraban con un mensaje emergente en sus pantallas: «Una ley que prohíbe TikTok ha sido promulgada en Estados Unidos». Esta situación dejó a millones de usuarios en la incertidumbre y sorprendió tanto a los entusiastas de la aplicación como a los expertos en tecnología.
La intervención de Donald Trump y la respuesta del gobierno
El bloqueo de TikTok en Estados Unidos no pasó desapercibido en la política del país. El expresidente Donald Trump, quien ya había intentado prohibir la aplicación durante su mandato, intervino rápidamente tras la promulgación de la ley. A través de su plataforma Truth Social, Trump anunció que planeaba emitir una orden ejecutiva el lunes siguiente, con el fin de extender el plazo de la prohibición durante 90 días. Esta medida buscaba dar tiempo a ByteDance para encontrar una solución y evitar la aplicación de las sanciones estipuladas por la nueva legislación.
En su primer mandato, Trump había emitido una orden ejecutiva similar para intentar bloquear TikTok, aunque esa orden fue revocada por Joe Biden cuando asumió la presidencia en enero de 2021. La preocupación de seguridad nacional relacionada con los vínculos de TikTok con China había sido uno de los principales motivos de esa iniciativa, y sigue siendo el núcleo del conflicto actual. La administración Biden también había mostrado interés en regular la aplicación, pero la nueva ley llegó como un paso más hacia la restricción de la plataforma.
Truth Social
Las preocupaciones de seguridad nacional y el impacto en la plataforma
El origen del conflicto radica en las preocupaciones de seguridad nacional que Estados Unidos tiene sobre TikTok. Las autoridades estadounidenses temen que el gobierno chino pueda tener acceso a los datos de los usuarios estadounidenses a través de ByteDance. Esta inquietud sobre la privacidad y la seguridad de los datos ha sido el motor detrás de la legislación que exige la desvinculación de TikTok de sus operaciones en el país.
En abril, el Congreso aprobó la ley que establecía que ByteDance debía cortar sus vínculos con las operaciones estadounidenses de la plataforma antes del 19 de enero. El plazo se cumplió el domingo, y los usuarios de TikTok encontraron que la app ya no estaba disponible para su descarga en las tiendas de aplicaciones de Apple y Google. Además, aquellos que ya tenían la aplicación instalada tampoco pudieron acceder a sus cuentas, lo que causó frustración entre los millones de personas que la usan diariamente.
La respuesta de la Corte Suprema y las alternativas en juego
El pasado viernes, la Corte Suprema de Estados Unidos respaldó de manera unánime la ley que prohíbe TikTok en el país, argumentando que los riesgos para la seguridad nacional superaban las preocupaciones sobre la limitación de la libertad de expresión de los usuarios. Esta decisión dejó en claro que el gobierno estadounidense está dispuesto a tomar medidas drásticas para proteger los datos de los ciudadanos y evitar lo que consideran una posible amenaza en términos de seguridad.
En medio de la controversia, surgieron varias propuestas para solucionar la crisis de TikTok en Estados Unidos. Una de ellas fue presentada por un consorcio de inversores liderado por el famoso empresario Kevin O’Leary, conocido por su participación en el programa «Shark Tank». Además, la compañía de inteligencia artificial Perplexity AI también expresó su interés en adquirir la aplicación para encontrar una salida a la situación. Sin embargo, la solución más destacada hasta el momento fue la intervención de Donald Trump, quien sigue siendo una figura clave en este debate.
Tiktok App
El impacto internacional de la prohibición
La medida adoptada por Estados Unidos no solo ha generado reacciones dentro del país, sino que también ha provocado fuertes críticas a nivel internacional, especialmente en China. Algunos comentaristas chinos han considerado que la prohibición de TikTok es una muestra más de la lucha por el dominio tecnológico entre las dos potencias globales, y han calificado la acción como una forma de suprimir la libertad en internet. Irónicamente, TikTok no opera en China, donde ByteDance ofrece una versión local de la aplicación llamada Douyin, que sigue las estrictas normas de censura impuestas por el gobierno chino.
El panorama global en torno a TikTok es cada vez más complejo, con una creciente presión por parte de gobiernos que buscan controlar el acceso y la influencia de la aplicación en sus respectivos países. A medida que surgen nuevas leyes y propuestas, la pregunta sobre el futuro de la plataforma sigue sin respuesta.