Una serie de tormentas intensas afecta a Texas, con potencial para tornados, granizo y lluvias torrenciales. En este contexto, el Servicio Meteorológico Nacional (NWS, por sus siglas en inglés) informó sobre la probabilidad de condiciones severas en diversas regiones, en particular al este de una línea trazada entre Madisonville y Freeport. Además, se emitieron advertencias de inundaciones y visibilidad reducida debido a niebla densa en áreas costeras.
El NWS destacó que las tormentas más intensas se desarrollarán entre la mañana y la noche de este jueves 26 de diciembre, con un aumento progresivo de lluvias en el sureste del estado. Estas condiciones elevan el riesgo de tornados, especialmente en zonas al este de la carretera interestatal 45. Entre las principales amenazas meteorológicas se incluyeron:
El pronóstico indicó acumulaciones de lluvia entre 12 y 50 mm en amplias zonas, con áreas localizadas que podrían superar los 125 mm. Las precipitaciones afectarán especialmente los cauces de arroyos y ríos, aunque no se anticiparon impactos significativos en sistemas fluviales mayores.
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Sin embargo, el NWS advirtió sobre posibles inundaciones menores, especialmente en caminos y áreas urbanas. En respuesta, se instó a la población a evitar desplazarse por carreteras anegadas.
En el área del Attoyac Bayou, cerca de Chireno, las autoridades emitieron una alerta de inundación. El río superará el nivel crítico de 4,3 metros en las próximas horas y se espera que alcance los 4,7 metros el sábado, lo que provocará el cierre de caminos secundarios y el traslado de ganado.
A medida que el frente frío avanza, se registraron temperaturas bajas y niebla densa en varias regiones durante la madrugada. Las zonas al sur de la Interestatal 10 enfrentaron reducciones drásticas de visibilidad, lo que afectó el tránsito y la navegación en Matagorda Bay.
El Servicio Meteorológico recomendó precaución para quienes transiten por áreas afectadas o realicen actividades marítimas. La visibilidad limitada dificultará la navegación, mientras que las condiciones costeras permanecerán inestables debido al desarrollo continuo de tormentas en el Golfo de México.
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Ante el riesgo de fenómenos meteorológicos extremos, el NWS emitió recomendaciones clave:
Por su parte, las autoridades locales instalaron barricadas y monitorearon los ríos en riesgo de desbordamiento, como el mencionado Attoyac Bayou. Se instó a los residentes a mantenerse informados mediante canales oficiales y a seguir las instrucciones de las autoridades.
El NWS pronosticó una disminución gradual de las tormentas durante la noche, aunque las lluvias persistirán cerca de la costa el viernes. Las temperaturas oscilarán entre 10°C y 24°C, con máximas en los 21°C en la mayor parte de Texas. Las áreas afectadas por niebla podrían experimentar una mejora en la visibilidad a medida que avance el día.
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Mientras tanto, los habitantes del sureste de Texas enfrentan un panorama meteorológico incierto, marcado por la amenaza de tormentas severas y condiciones inestables. La vigilancia continua y la preparación adecuada serán esenciales para minimizar los riesgos en las próximas horas.