Un hombre que cumplía cadena perpetua en prisión por la muerte de la niña hispana Kayla Gomez-Orozco, de 10 años, en 2016, se suicidó, informaron las autoridades.
Según un informe estatal, Gustavo Zavala-García, de 31 años, de Bullard, fue encontrado sin vida en la Unidad Wainwright en Lovelady el 2 de julio. El informe indica que Zavala-García fue declarado muerto a las 5:43 a.m.
El informe menciona el suicidio como forma de muerte. Los métodos de muerte son “ahorcamiento, estrangulamiento” y que utilizó una ligadura casera como arma.
Kayla desapareció durante un servicio de oración el 1 de noviembre de 2016 en una iglesia en Bullard. Su cuerpo fue encontrado más tarde en un pozo de agua en la casa de Zavala-García en FM 2493.
En agosto de 2019, Zavala-García se declaró culpable de asesinato capital y fue condenado a cadena perpetua.