La excandidata presidencial republicana Nikki Haley, ahora aliada de Donald Trump, se ha convertido en la última del rosario de políticos estadounidenses en visitar Israel y mostrar su apoyo al estado hebreo, aunque en su caso ha ido más lejos que otros colegas suyos.
En el curso de una visita a un puesto de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) en la frontera norte del país con el Líbano, Nikki Haley escribió un mensaje con un marcador sobre uno de los proyectiles listos para ser disparados sobre el Líbano.
«¡Acaben con ellos! EE.UU. ama a Israel. Por siempre, Nikki Haley», escribió de su puño y letra sobre un cohete M795, proyectil explosivo con efectos de fragmentación y onda expansiva común también en las Fuerzas Armadas estadounidenses, según han recogido varios medios, también israelíes.
Aunque Haley posteó en su cuenta de X varias fotografías de su visita, se abstuvo de incluir la imagen en la que ella aparece escribiendo sobre el proyectil.
En su visita junto a Danny Danon, parlamentario israelí y antiguo embajador ante la ONU, Haley hizo unas breves declaraciones en el mismo sentido: Estados Unidos -dijo- «apoya a Israel. Israel lucha hoy contra los enemigos de Estados Unidos. No paren hasta haber triunfado», dijo dirigiéndose a Danon.
Haley fue precandidata republicana hasta hace varias semanas, cuando se retiró de la carrera dejando a Donald Trump como único candidato (aún por oficializar). La semana pasada, y tras varios meses de distanciamiento, Haley anunció que votaría por Trump, a pesar de la ‘moderación’ de la que ella hace gala y de las acerbas críticas que ha expresado contra él en el pasado.