Las autoridades sanitarias federales costearán este año las vacunas contra la gripe de los trabajadores agrícolas que lo deseen, en una estrategia para frenar la propagación de la gripe aviar tras el contagio de al menos 13 empleados de granjas lecheras y avícolas.
Todos los casos de esta enfermedad en humanos en Estados Unidos han tenido síntomas leves, y se cree que fueron transmitidos directamente de animales infectados y no entre personas.
Pero a las autoridades sanitarias les preocupa lo que pueda ocurrir si las personas se infectan al mismo tiempo con gripe aviar y gripe estacional. Es posible que los virus intercambien segmentos de genes, en un proceso que los científicos denominan reordenación. La gripe aviar podría adquirir así la capacidad de propagarse entre las personas con la misma facilidad que la gripe estacional.
Para prevenir esas coinfecciones, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) anunciaron el martes que destinarán cinco millones de dólares a la compra de vacunas contra la gripe estacional y a la vacunación de trabajadores agrícolas en otoño, en colaboración con autoridades estatales y locales. Otros cinco millones se destinarán a la promoción de estas vacunas.
“Queremos hacer todo lo posible para reducir el riesgo de que el virus mute”, declaró Nirav Shah, vicedirector de los CDC.
Las vacunas contra la gripe estacional no protegen contra la gripe aviar pero podrían reducir las coinfecciones, añadió Shah. Los CDC están estudiando la posibilidad de ofrecer a algunos trabajadores el medicamento antivírico Tamiflu para evitar que contraigan la gripe.
Las autoridades estadounidenses afirmaron que hay al menos 200,000 trabajadores ganaderos en el país. Según el Centro Nacional para la Salud de los Trabajadores Agrícolas, cerca de una cuarta parte suelen vacunarse contra la gripe estacional.
Se está produciendo una cantidad limitada de vacuna contra la gripe aviar para las personas, pero el Gobierno no la recomienda para trabajadores agrícolas porque no existe el tipo de propagación de persona a persona que desencadenaría ese tipo de campaña.
El virus de la gripe aviar lleva propagándose desde 2020 entre mamíferos —perros, gatos, zorrillos, osos e incluso focas y marsopas— en decenas de países. A principios de este año, el virus conocido como H5N1 fue detectado en ganado en Estados Unidos.