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El viernes, antes de mediodía, agentes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) intentaron ingresar a la escuela primaria Hamline en Chicago, Illinois. Sin embargo, según informó Bogdana Chkoumbova, responsable ejecutiva del sistema de escuelas públicas de la ciudad, los agentes no lograron obtener acceso a la institución educativa ni pudieron comunicarse con estudiantes o personal. La situación generó inquietud en la comunidad, pero afortunadamente, no se registraron arrestos y todos los estudiantes y empleados se mantuvieron a salvo.
La respuesta de la escuela a la presencia de ICE
De acuerdo con la declaración de Chkoumbova, el personal de la escuela siguió rigurosamente los protocolos establecidos para este tipo de situaciones. En su rueda de prensa, la funcionaria indicó que los agentes de ICE no lograron entrar al edificio y que no se realizaron detenciones. «Los estudiantes y trabajadores están a salvo», aseguró, dejando en claro que la seguridad de la comunidad escolar fue la prioridad.
Por su parte, la directora de la escuela, Natasha Ortega, manifestó que no permitiría la entrada de agentes de ICE a menos que estos presentaran una orden judicial. «Estamos aquí para proteger a nuestros niños», enfatizó Ortega en declaraciones a NBC News Chicago, un canal local asociado a Noticias Telemundo. Este incidente pone de manifiesto las tensiones y temores que existen en comunidades con una alta presencia de inmigrantes, especialmente en un momento en que las políticas de inmigración se han endurecido en el país.
El contexto de la política migratoria bajo el Gobierno de Trump
Este suceso ocurrió en un contexto de creciente tensión sobre las políticas migratorias en los Estados Unidos. La administración de Donald Trump, que se comprometió a llevar a cabo el programa de deportaciones masivas más grande en la historia del país, ha eliminado muchas de las restricciones impuestas por el Gobierno del demócrata Joe Biden. Entre las medidas revocadas se encuentran las que limitaban las redadas de ICE en lugares sensibles, como escuelas, hospitales y templos religiosos.
El cambio de políticas ha generado preocupación, especialmente en las comunidades vulnerables, ya que las acciones de ICE se han intensificado. Recientemente, el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) informó que ICE y la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) ahora tienen luz verde para aplicar las leyes migratorias con mayor rigor, lo que significa que las personas que han ingresado ilegalmente al país ya no pueden encontrar refugio en lugares como escuelas e iglesias. Este endurecimiento de las políticas ha sido criticado por grupos pro derechos humanos, que temen por la seguridad y el bienestar de los inmigrantes.
El perfil de la escuela Hamline y su población estudiantil
La escuela primaria Hamline se encuentra en una comunidad de bajos ingresos y con una alta representación de familias inmigrantes. Según el informe de Illinois Report Card, el 98% de los estudiantes provienen de familias de bajos recursos, y el 92% de los niños son de origen hispano. Estos datos reflejan el contexto en el que se produjo la tentativa de ingreso de ICE, lo que hace que el incidente sea aún más relevante para la comunidad local.
Con 572 estudiantes matriculados, que van desde prekínder hasta el octavo grado, la escuela Hamline representa a una de las comunidades más vulnerables de Chicago. La presencia de ICE en una institución educativa de este tipo resalta las tensiones generadas por las políticas migratorias actuales y la preocupación de los padres, maestros y estudiantes por su seguridad.
