En un movimiento que ha generado un debate considerable, el gobernador de Florida, Ron DeSantis, firmó un conjunto de leyes de inmigración que, según sus defensores, son las más estrictas del país. Estas medidas están diseñadas para fortalecer la aplicación de la ley migratoria a nivel estatal y local, siguiendo la promesa de deportaciones masivas impulsada por el expresidente Donald Trump.
Nuevas leyes de inmigración en Florida: Un endurecimiento de las políticas
Las leyes recientemente firmadas por DeSantis aumentan las penas para los inmigrantes que cometan delitos en el estado sin la autorización legal para permanecer en Estados Unidos. Una de las medidas más significativas es la pena de muerte para aquellos que sean declarados culpables de delitos capitales, como el asesinato en primer grado o la violación infantil. Esta disposición ha provocado una fuerte reacción entre sectores políticos y defensores de derechos civiles, quienes argumentan que va en contra de precedentes establecidos por la Corte Suprema de Estados Unidos. Incluso algunos legisladores republicanos han expresado dudas sobre la constitucionalidad de la medida.
Ingreso ilegal a Florida: Nuevo delito estatal
Una de las disposiciones más controversiales de las nuevas leyes establece un nuevo delito estatal: el ingreso ilegal a Florida. Esta medida afecta a los inmigrantes mayores de 18 años que, habiendo evitado las inspecciones oficiales en la frontera, se desplacen hacia el estado. Con esta norma, las autoridades estatales obtienen mayores herramientas legales para procesar a quienes ingresen al territorio de Florida sin autorización.

El gobernador de Florida, el republicano Ron DeSantis, en una imagen de archivo. EFE/EPA/Cristóbal Herrera-Ulashkevich
Sin embargo, los críticos han señalado que esta política podría resultar en la persecución de inmigrantes que llevan años viviendo en el país sin antecedentes criminales. La medida genera preocupación por la posibilidad de que inmigrantes que contribuyen positivamente a la comunidad sean objeto de acciones legales.
Eliminación de matrícula estatal para inmigrantes en situación irregular
Otra de las medidas contenidas en las nuevas leyes revoca una ley de 2014 que permitía a los estudiantes inmigrantes en situación irregular acceder a la matrícula estatal en universidades públicas. Esto les permitía pagar tarifas más bajas que las que se aplican a los estudiantes de otros estados. La ley original fue firmada por el gobernador Rick Scott bajo el argumento de que beneficiaría a jóvenes que habían crecido en Florida. Sin embargo, con la nueva legislación, estos estudiantes deberán pagar tarifas más altas de matrícula, lo que podría dificultar el acceso a la educación superior para muchos de ellos.
Junta Estatal de Aplicación de la Ley de Inmigración: Coordinación de esfuerzos
Para coordinar la implementación de las nuevas medidas, DeSantis ha creado la Junta Estatal de Aplicación de la Ley de Inmigración. Este organismo está compuesto por el gobernador, el fiscal general, el jefe financiero del estado y el comisionado de agricultura. Su tarea será coordinar los esfuerzos con las agencias federales de inmigración y distribuir $250 millones en subvenciones a agencias locales de aplicación de la ley.
El gobernador de Florida, el republicano Ron DeSantis, en una fotografía de archivo. EFE/Giorgio Viera
Larry Keefe, exfiscal federal y arquitecto de la polémica operación de 2022 que transportó a 50 migrantes desde Texas a Martha’s Vineyard en Massachusetts, ha sido designado como director de esta junta. El programa estatal de transporte de migrantes, que se lanzó en 2022 con un presupuesto de $12 millones, se ha reformado y ampliado con una inversión de $298 millones.
Modificación en el poder de deportación estatal
En un principio, DeSantis propuso otorgar a las autoridades estatales el poder de deportar inmigrantes fuera del país. Sin embargo, la versión final de la ley eliminó esta disposición, dejando en claro que Florida solo podrá trasladar inmigrantes fuera del estado si las autoridades federales lo solicitan y financian el proceso. Este cambio resalta el desafío que enfrenta el estado de Florida al intentar implementar políticas migratorias más estrictas sin contravenir las leyes federales.
Refuerzo de la cooperación con ICE: Autoridad para detener inmigrantes
Las nuevas leyes también refuerzan la cooperación entre la Patrulla de Carreteras de Florida y el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE). A los oficiales estatales se les ha otorgado autoridad para interrogar, arrestar y detener inmigrantes, así como para realizar operativos de control en carreteras y otras áreas públicas. Esto refuerza la postura de DeSantis de tratar la inmigración como una crisis no atendida por el gobierno federal.