«Es un halcón belicista radical. Pongámosla ahí con un rifle y con nueve cañones apuntándole, ¿de acuerdo? Veamos cómo se siente al respecto, con las armas apuntando directo a su cara», afirmó el jueves el aspirante republicano a la Presidencia de EE. UU., Donald Trump, sobre la excongresista Liz Cheney.
En respuesta, la fiscal general de Arizona, la demócrata Kristin Mayes, abrió este viernes para determinar si se trató de una «amenaza de muerte».
«No estoy preparada en este momento para decir si lo fue o no (una amenaza), pero eso no es algo bueno ahora que nos preparamos para nuestras elecciones y tratamos de asegurar la paz en los centros de votación y en nuestro estado», añadió.
«Esa es la pregunta, si se pasó de la raya. Es muy preocupante», dijo Mayes. «Es el tipo de cosas que irritan a la gente y que hacen que nuestra situación en Arizona y otros estados sea más peligrosa».
Durante un acto la noche del jueves en Arizona con el presentador conservador Tucker Carlson, Trump sugirió que Cheney debería enfrentarse a un pelotón de fusilamiento por sus posiciones en política exterior.
Cheney anunció su voto por Harris
La excongresista respondió hoy a las palabras de Trump: «Así es cómo los dictadores destruyen los países libres: amenazan con la muerte a quienes hablan en su contra».
«No podemos confiar nuestro país y nuestra libertad a un hombre mezquino, vengativo, cruel e inestable que aspira a ser un tirano», añadió.
Cheney llegó a ser número 3 de los republicanos en la Cámara de Representantes y fue una de las pocas que se atrevió a hacerle frente a Trump durante su mandato, algo que le costó su puesto de congresista.
Tras ese cisma, la excongresista y su padre, el exvicepresidente republicano Dick Cheney (2001-2009) anunciaron su voto por la candidata demócrata, la vicepresidenta Kamala Harris.
Harris condena comentario de Trump
Harris reaccionó este jueves a las palabras de Trump, asegurando que «debería ser motivo suficiente para descalificarlo».
«Trump ha intensificado su retórica violenta hacia sus oponentes políticos y ha sugerido, de manera muy detallada, que se deben apuntar rifles contra la exrepresentante Liz Cheney», afirmó Harris en declaraciones a medios este viernes en el aeropuerto de Madison (Wisconsin).
«Cualquiera que quiera ser presidente de Estados Unidos y use ese tipo de lenguaje violento no está capacitado para ocupar ese cargo», añadió.
Mientras, la portavoz de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, indicó que la «violencia política» es «inaceptable» y «peligrosa». «La violencia no tiene cabida en nuestra sociedad, no debe usarse en ningún lugar y en ningún momento», afirmó la portavoz, en declaraciones a la prensa.