El Mando Central de Estados Unidos (CENTCOM) ha informado el pasado viernes de la destrucción de un lanzamisiles y un buque de los rebeldes hutíes yemeníes en zonas del país bajo su control, así como de dos drones del mismo grupo sobre el mar Rojo.
«En las últimas 24 horas, las fuerzas del Comando Central de Estados Unidos (USCENTCOM) han destruido con éxito un lanzamisiles hutí respaldado por Irán y un buque de superficie no tripulado en zonas controladas por los hutíes en Yemen», ha anunciado del CENTCOM en una publicación en la red social X en la que han reportado también haber interceptado «dos vehículos aéreos no tripulados hutíes sobre el mar Rojo».
El Ejército estadounidense ha justificado su actuación defendiendo que «estas armas representaban una amenaza clara e inminente» tanto para las fuerzas de Estados Unidos como para las de la coalición internacional y para los buques mercantes que operan en la región.
Así las cosas, desde el Mando Central han advertido de la amenaza que representa para «la estabilidad y la seguridad regionales» esta conducta «temeraria y peligrosa de los hutíes, que cuentan con el apoyo de Irán».
Los hutíes, que controlan la capital yemení, Saná, y otras zonas del norte y el oeste del país desde 2015, han lanzado varios ataques contra territorio de Israel y contra buques con algún tipo de conexión israelí a raíz de la ofensiva desatada contra Gaza tras los ataques perpetrados el 7 de octubre por el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás).
Asimismo, han atacado buques y otros bienes estratégicos estadounidenses y británicos en respuesta a los bombardeos de estos países contra Yemen en una intervención que Washington y Londres fundamentan en su voluntad de garantizar la seguridad de la navegación en el mar Rojo, el golfo de Adén y el océano Índico.