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Elon Musk y Sam Altman discuten por el proyecto Stargate
El lanzamiento del proyecto de inteligencia artificial «Stargate», liderado por el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, ha generado una gran controversia entre dos grandes figuras del mundo tecnológico: Elon Musk y Sam Altman. Este proyecto tiene como objetivo crear una infraestructura avanzada de IA en EE. UU., con una inversión inicial de 100 mil millones de dólares, respaldada por empresas como SoftBank, Oracle, OpenAI y MGX. Se estima que el presupuesto total alcanzará los 500 mil millones de dólares en los próximos años.
Elon Musk, conocido por sus opiniones directas y polémicas, utilizó su cuenta en la plataforma X para atacar a Sam Altman, CEO de OpenAI, no solo cuestionando las intenciones detrás del proyecto, sino también la viabilidad financiera del mismo. Musk expresó en un mensaje que Altman era un “mentiroso” y añadió que el proyecto Stargate no tiene el respaldo económico necesario, afirmando que SoftBank tiene menos de 10 mil millones de dólares garantizados, basándose en fuentes confiables.
La relación entre Musk y Altman se ha caracterizado por tensiones desde hace varios años, especialmente después de que Musk dejara OpenAI, una organización que ambos cofundaron en 2015 con el objetivo de desarrollar una IA sin fines de lucro y con código abierto. Sin embargo, Musk considera que OpenAI se desvió de su misión original y acusó a Altman de buscar intereses personales. En sus publicaciones, Musk mencionó que Altman había mentido al Congreso al declarar que no recibiría compensación de OpenAI, pero ahora pedía 10 mil millones de dólares por su participación en Stargate, lo que Musk considera hipócrita.
Sam Altman respondió a las críticas de Musk, calificando sus comentarios como incorrectos. En un post en X, el CEO de OpenAI invitó a Musk a conocer el progreso del proyecto, sugiriendo que era positivo para el país. Altman también le dirigió un mensaje directo a Musk, diciéndole que, aunque sus intereses empresariales puedan diferir, debería priorizar los intereses de EE. UU. en su nuevo rol, aludiendo a las responsabilidades de Musk en el campo de la política de IA.
La disputa entre Musk y Altman no solo se centra en el ámbito de la tecnología, sino también en la política. Musk ha criticado las relaciones pasadas de Altman, especialmente su vinculación con personas cercanas al Partido Demócrata, como Reid Hoffman, cofundador de LinkedIn. Musk compartió en su plataforma una publicación de 2021 en la que Altman agradecía a Hoffman por sus esfuerzos para evitar la reelección de Trump, lo que aumentó las tensiones y generó más críticas hacia Altman, incluso de comentaristas de derecha como Mike Cernovich.
Altman, por su parte, intentó suavizar su postura sobre Trump en público. En declaraciones recientes, reconoció que su opinión sobre el presidente ha cambiado, afirmando que ahora cree que Trump podría ser beneficioso para el país en varios aspectos. Esta declaración marcó un giro en la actitud de Altman hacia el presidente, algo que no pasó desapercibido en el contexto de la creciente disputa.
El proyecto Stargate, que fue oficialmente anunciado el martes, busca crear una infraestructura avanzada de centros de datos y tecnologías de IA, con el objetivo de consolidar a EE. UU. como líder mundial en el campo de la inteligencia artificial. Los promotores del proyecto, entre los que se encuentran Masayoshi Son de SoftBank y Larry Ellison de Oracle, lo han descrito como esencial para la futura infraestructura del país.
A pesar del entusiasmo de los involucrados en el proyecto, Musk ha expresado dudas sobre no solo la capacidad financiera, sino también la transparencia detrás de Stargate. La situación se ha complicado aún más con la intervención de figuras políticas como Steve Bannon, exasesor de Trump, quien ha criticado públicamente a Musk por socavar el proyecto, calificando sus comentarios como perjudiciales para los esfuerzos del gobierno estadounidense.
Bannon, en declaraciones recogidas por Mashable, afirmó que las críticas de Musk al proyecto Stargate eran inaceptables, ya que están saboteando los esfuerzos de la administración de Trump. En su opinión, Musk ha cruzado una línea, y sus acciones están fuera de control.
