El papa Francisco pide a la Iglesia de EE. UU. resistir las narrativas discriminatorias hacia los migrantes
El papa Francisco ha expresado su preocupación sobre las deportaciones masivas que se están llevando a cabo en Estados Unidos, afirmando que estas acciones «lastiman la dignidad de muchas personas». En su mensaje, instó a la Iglesia de EE. UU. a mantenerse firme y no ceder ante las narrativas que discriminan a los migrantes y refugiados, quienes sufren innecesariamente debido a las políticas actuales.
El daño de las deportaciones a la dignidad humana
En una carta dirigida a los obispos de Estados Unidos, Francisco destacó que las deportaciones no solo afectan a individuos, sino también a familias enteras, colocándolas en una situación de vulnerabilidad. En muchos casos, los migrantes que han dejado sus hogares lo hicieron debido a la pobreza extrema, inseguridad, persecución o el deterioro del medio ambiente. Según el papa, estas deportaciones no solo son injustas, sino que también destruyen la dignidad humana de aquellos que ya enfrentan grandes dificultades.
La llamada de Francisco a la solidaridad y la resistencia
El papa Francisco hizo un llamado a todos los fieles de la Iglesia católica y a las personas de buena voluntad a unirse en solidaridad con los migrantes. Les pidió que no cedan ante las narrativas que perpetúan la discriminación y el sufrimiento de los refugiados y migrantes. Este mensaje resalta la importancia de proteger a los más vulnerables y de rechazar las políticas que los marginan.
El sufrimiento de los migrantes y refugiados
Francisco subraya que los migrantes no buscan abandonar sus tierras por elección, sino que se ven obligados a hacerlo debido a condiciones extremas que amenazan su vida y bienestar. La carta también hace hincapié en que el acto de deportar a estas personas, que han enfrentado tantas adversidades, solo aumenta su sufrimiento y vulnerabilidad. El papa hace un llamado a la humanidad de quienes tienen la capacidad de cambiar estas políticas para que reconozcan la dignidad de todas las personas, sin importar su estatus migratorio.
El papel de la Iglesia en la defensa de los migrantes
El papa Francisco también hizo un llamado directo a la Iglesia en EE. UU. para que se mantenga firme en su defensa de los derechos humanos, especialmente los de los migrantes y refugiados. La Iglesia, como institución, tiene la responsabilidad de guiar a sus fieles en la lucha por la justicia y la compasión, enfatizando que el trato digno a todos los seres humanos debe ser la base de las decisiones políticas y sociales.