Un informe reciente de la consultora laboral Challenger, Gray & Christmas reveló que los despidos en el sector federal de EE. UU., como parte de los recortes impulsados por el gobierno de Donald Trump, superaron los 62,200 en el mes de febrero. Esta cifra marca el mayor volumen de despidos mensuales en el país desde el inicio de la pandemia de COVID-19.
El reporte, publicado por la firma de recolocación de ejecutivos más grande de EE. UU., también indica que el total de despidos a nivel nacional alcanzó más de 172,000 durante el mismo período. Esta cifra representa un aumento del 245 % en comparación con enero y un 103 % más en comparación con el mismo mes del año anterior. Además, es el mayor número de despidos desde julio de 2020, cuando la incertidumbre generada por la pandemia estaba en su punto máximo.
Recortes federales: El impacto de Trump y Elon Musk en los despidos
Más de un tercio de los despidos en febrero fueron resultado de las decisiones del Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE, por sus siglas en inglés), creado por el presidente Donald Trump y encabezado por el magnate tecnológico Elon Musk. Este departamento tiene como objetivo reducir el tamaño del gobierno federal y optimizar los recursos.
La cifra total de despidos que se alcanzó en febrero marca un hito, ya que fue el mayor número registrado desde 2009, en medio de la crisis financiera global. Los 62,242 despidos en el sector público corresponden a 17 agencias federales diferentes, lo que resalta la magnitud de los recortes impuestos por la administración Trump.
El sector público lidera los despidos en EE. UU.
Según el informe de Challenger, Gray & Christmas, el sector público fue el más afectado, representando el 36.1 % de los despidos totales. Esto refleja la implementación de los recortes en agencias gubernamentales, las cuales han experimentado ajustes drásticos en personal debido a la política de Trump de reducir el tamaño del aparato estatal. A una distancia considerable, le siguen otros sectores, como el comercio minorista (22.6 %) y el sector tecnológico (8.4 %), que también han experimentado pérdidas de empleos, aunque en menor medida.
El legado de Trump: Recortes y desmantelamiento de programas federales
La victoria de Donald Trump en las elecciones presidenciales de noviembre fue en gran parte impulsada por su promesa de reducir el gasto público y recortar la burocracia del gobierno federal. Bajo este enfoque, se implementaron medidas que no solo implicaron la eliminación de miles de empleos públicos, sino también la congelación de fondos y subsidios en diversas áreas, afectando programas clave como la ayuda humanitaria internacional, los préstamos estudiantiles y los fondos para investigaciones científicas y sanitarias.
Uno de los cambios más significativos bajo la administración de Trump y el liderazgo de Elon Musk fue el desmantelamiento de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID). Esta agencia, encargada de coordinar la ayuda extranjera, fue una de las instituciones que se vio más afectada por los recortes y reestructuración del gobierno federal.
La congelación de fondos y subsidios federales
Además de los despidos masivos, la administración Trump ha tomado medidas que impactan directamente a los sectores más vulnerables de la sociedad estadounidense y del extranjero. La congelación de fondos ha afectado a una variedad de programas, desde la asistencia alimentaria en EE. UU. hasta la ayuda internacional en regiones afectadas por crisis humanitarias. Estos recortes también han tenido consecuencias en el ámbito educativo y de salud pública, ya que algunos programas de préstamos estudiantiles y subsidios para investigaciones científicas también fueron congelados o reducidos.
La situación ha generado un debate sobre los efectos a largo plazo de estos recortes, especialmente en sectores cruciales como la educación y la salud pública. Sin embargo, el gobierno de Trump ha defendido estas decisiones como parte de su esfuerzo por reducir el déficit y aumentar la eficiencia del gobierno federal.
El papel de Elon Musk en los recortes federales
Elon Musk, al frente del Departamento de Eficiencia Gubernamental, ha sido una figura clave en la implementación de estos recortes. Su enfoque hacia el gobierno federal y la burocracia ha estado alineado con la visión de Trump de crear un gobierno más ágil y menos costoso. A pesar de su éxito como empresario y líder de empresas como Tesla y SpaceX, la figura de Musk ha sido controversial debido a su enfoque disruptivo en la administración pública.
Los críticos argumentan que los recortes impulsados por Musk y Trump no solo están afectando a miles de trabajadores públicos, sino que también están debilitando programas esenciales que han sido fundamentales para el bienestar social y el desarrollo internacional. Estos cambios en la estructura del gobierno federal continúan siendo un tema de discusión y oposición entre los grupos progresistas.