El gobernador de Florida, el republicano, Ron DeSantis, defendió este lunes la investigación que efectúa la policía electoral en torno a la consulta que responderán en las próximas elecciones generales los votantes de este estado sobre el derecho constitucional al aborto.
«Están haciendo lo que se supone que deben hacer», argumentó DeSantis durante una rueda de prensa ofrecida este lunes en el condado de Miami-Dade, en el sur de Florida (EE.UU.), en respuesta a informes periodísticos sobre la visita de agentes de la Policía Electoral de Florida a los domicilios de algunos de los firmantes que apoyaron la consulta.
Los votantes de Florida tendrán que decidir en los comicios generales del próximo 5 de noviembre si es que el derecho al aborto debe quedar consagrado en la Constitución estatal por medio de una enmienda, una cuestión que requerirá el 60 % de votos favorables para salir adelante.
La pregunta logró figurar en la cartilla luego de que sus impulsores sobrepasarán con holgura las 900.000 firmas exigidas por las autoridades electorales de Florida (sumaron casi un millón de rúbricas), además de imponerse en alguna batalla judicial entablada por el Gobierno estatal.
El plebiscito se puso en marcha luego de que en mayo de este año entrara en vigor en Florida la prohibición al aborto a partir de la sexta semana de embarazo, una propuesta impulsada por DeSantis y una de las más restrictivas de EEUU.
El gobernador señaló este lunes que la investigación ha descubierto que algunas firmas ya verificadas no corresponden con los registros de la firma del votante, y que además un grupo favorable a la petición «presentó decenas de peticiones en nombre de (personas) muertas”.
En las últimas semanas, el estado solicitó a por lo menos seis supervisores electorales de condado copias de decenas de miles de las firmas verificadas en apoyo a la consulta sobre la Enmienda 4 de la constitución estatal, que de salir aprobada dejaría sin efecto la prohibición del aborto a las seis semanas.
La investigación estatal, a menos de dos meses de que se celebren las elecciones, ha merecido el rechazo de grupos a favor de los derechos reproductivos de las mujeres y de los demócratas floridanos.
En una rueda de prensa ofrecida hoy, la presidenta del Partido Demócrata de Florida, Nikki Fried, dijo que se hallan analizando tomar medidas legales para detener «las tácticas de intimidación» contra la consulta, unas maniobras que calificaron de «interferencia electoral».
«Van a hacer lo que sea necesario, incluido quebrar la ley, para sabotear la iniciativa. Esto solo pasa en países con regímenes autoritarios», manifestó Fried.
Los demócratas floridanos igualmente pusieron de relieve que DeSantis está usando recursos públicos para hacer campaña contra la consulta, como lo demuestra un sitio web creado la semana pasada por una agencia estatal que da «un mensaje político» y en contra de la enmienda.
El gobernador retrucó hoy que la página web puesta en marcha por la Agencia de Florida para la Administración de Atención Médica (AHCA, en inglés) supone un «anuncio de servicio público» que brinda «información precisa».
Un sondeo difundido el pasado viernes y hecho por Emerson College Polling para el medio The Hill reflejó que un 55 % de votantes floridanos marcaría la casilla del «si», es decir a favor de la enmienda que permitiría la protección constitucional al aborto, mientras que un 26 % votaría por el «no» y un 20 % se confiesa indeciso.