Letreros con mensajes racistas y antiimigrantes, algunos dirigidos a la vicepresidenta y candidata demócrata, Kamala Harris, fueron atornillados en al menos tres paradas de autobuses en Denver, Colorado, informaron las autoridades este viernes.
“RTD condena enérgicamente el mensaje de odio y discriminación de estos carteles”, señaló en un comunicado el Distrito Regional de Transporte (RTD, por sus siglas en inglés) que sirve al área metropolitana de Denver.
“Los letreros no reflejan los valores adoptados por la organización ni promueven un ambiente de tránsito acogedor para todos, y esos viles mensajes no deberían ser tolerados o apoyados por nadie”, indicó la agencia. “No hay lugar para el racismo o la discriminación en RTD o dentro de las comunidades a las que servimos”.
El primero de los letreros fue reportado a las 5 de la mañana por un conductor del transporte público colectivo, según RTD. Un ciudadano contó al medio local The Denver Post que vio a dos mujeres blancas colocando los otros dos.
Uno de los mensajes sugiere traer de vuelta algunas medidas racistas contra la comunidad negra de la época de la segregación. Otros arremeten contra los inmigrantes que llegan a Estados Unidos a través de la frontera sur.
“Esto es indignante, muy racista, la gente que los colocó debería ser juzgada”, aseguró Terry Elzi, habitante de la ciudad, a la estación local de la cadena CBS News.
La policía de Denver aseguró que investiga el incidente como un crimen motivado por la discriminación, mientras RTD indaga si se trata de una actividad racista coordinada presente en otros estados como Illinois, según la afiliada de la cadena NBC News.
El gobernador de Colorado, Jared Polis, y el alcalde de Denver, Mike Johnston, demócratas ambos, condenaron los mensajes en publicaciones en sus cuentas en X, antes Twitter.
“No hay lugar para el odio en nuestro estado. Estas imágenes horribles y racistas –financiadas por grupos desconocidos– pretenden avivar el miedo y el odio en nuestras comunidades”, escribió Polis.
Johnston, por su parte, calificó los mensajes como “vergonzosos” y aseguró que “este tipo de comportamiento aborrecible y racista no es bienvenido aquí”.
El alcalde insistió en que Denver es una ciudad “inclusiva” que da una oportunidad a las personas de distintas comunidades “y lucharemos para que así siga siendo”.