Más de 2.400 bomberos, seis helicópteros y más de 150 camiones forman parte del contigente que lleva combatiendo desde mediados de esta semana el incendio forestal más grande del año en el estado de California y el séptimo en toda su historia, el incendio de Park, donde las llamas han arrasado ya en los condados de Butte y Tehama una superficie aproximada de casi 150.000 hectáreas, más amplia que la ciudad de Los Ángeles.
El gobernador del estado, Gavin Newsom, ha declarado el estado de emergencia para facilitar la lucha contra un incendio que, la noche del sábado, solo estaba contenido en un 10 por ciento, de acuerdo con fuentes de la lucha contra el fuego a la cadena estadounidense CNN.
De momento no se tiene constancia de víctimas mortales pero ya hay una persona detenida bajo sospecha de haber provocado el incendio, un hombre identificado como Ronnie Dean Stout II, de 42 años, acusado de haber empujado un coche ardiendo en el parque de Bidwell, según el fiscal del condado de Butte, Mike Ramsey.
A este incendio hay que sumar otro declarado en el condado de Plumas y que ha quemado otras 30.000 hectáreas.
«Estamos utilizando todas las herramientas disponibles para proteger vidas y propiedades mientras nuestros equipos de bomberos y respuesta a emergencias trabajan las 24 horas para combatir estos desafiantes incendios», ha manifestado Newsom en un comunicado.
«Permanezcan a salvo y permanezcan atentos a las instrucciones de las autoridades locales mientras continúan las peligrosas condiciones climáticas de incendios», ha añadido el gobernador.