Blue Origin, la empresa espacial fundada por Jeff Bezos en el año 2000, ha cancelado el lanzamiento de su primer cohete orbital. El cohete New Glenn, que debía ser lanzado el lunes a la 1:00 a.m. (hora ET) desde una plataforma de lanzamiento controlada por la compañía en Florida, no pudo despegar debido a un problema técnico que los ingenieros de Blue Origin no lograron resolver rápidamente. Como resultado, los controladores de vuelo decidieron suspender el intento de lanzamiento.
La compañía no compartió detalles inmediatos sobre la naturaleza de los problemas que se presentaron, pero, según Ariane Cornell, vicepresidenta del sistema espacial de Blue Origin, «estamos suspendiendo el intento de lanzamiento de hoy (lunes) para solucionar un problema en el subsistema del vehículo». Tras la cancelación, los ingenieros procedieron a vaciar el combustible del cohete, pero aún no está claro cuándo podrán realizar otro intento de lanzamiento.
Cornell añadió: «A partir de ahí, vamos a evaluar, como se mencionó, qué cosas nos gustaría hacer durante nuestro tiempo de inactividad. Y eso es lo que nos guiará para decidir cuándo será la próxima oportunidad de lanzamiento».
New Glenn en la plataforma de lanzamiento del Complejo 36 en Cabo Cañaveral, Florida, el 27 de diciembre de 2024. Foto de Blue Origin
¿Qué es el cohete New Glenn de Blue Origin?
El cohete New Glenn es un vehículo de lanzamiento desarrollado por Blue Origin, diseñado para competir con otras compañías líderes en la industria espacial, como SpaceX. Con una altura de aproximadamente 98 metros, similar a un edificio de 30 pisos, New Glenn se considera el primer cohete orbital de la empresa, capaz de lanzar satélites y naves espaciales a la órbita. Este cohete está compuesto por varias etapas: la primera etapa incluye un propulsor que proporciona el impulso inicial, mientras que la etapa superior alberga un compartimento de carga donde se colocan las tecnologías experimentales, como las que fueron transportadas en esta misión.
El cohete New Glenn se está probando para misiones más complejas, y su principal objetivo es demostrar que puede llegar a la órbita. De ser exitoso, este lanzamiento marcaría un hito en la historia de Blue Origin, pues abriría las puertas a futuras misiones comerciales y gubernamentales.
Objetivos de Blue Origin con el lanzamiento de New Glenn
El vuelo de prueba del cohete New Glenn tiene varios objetivos importantes para Blue Origin. Uno de los principales es poner a prueba el diseño de este cohete, que la compañía ha estado desarrollando durante más de una década. Además, se busca probar la tecnología que Blue Origin planea utilizar en su futura nave espacial Blue Ring, la cual podría funcionar como un servicio de «viaje compartido» en el espacio, permitiendo el lanzamiento de satélites a diferentes órbitas.
Otro de los objetivos cruciales de este vuelo es obtener la certificación del cohete para lanzamientos de seguridad nacional. Esta codiciada designación permitiría a New Glenn transportar cargas útiles militares, abriendo la puerta a lucrativos contratos con el Departamento de Defensa de los Estados Unidos. La certificación facilitaría la competencia de Blue Origin con SpaceX y United Launch Alliance (ULA), compañías que dominan actualmente el mercado de lanzamientos espaciales.
Los vuelos de certificación son esenciales para que el gobierno de Estados Unidos evalúe el diseño y rendimiento de los cohetes comerciales, según informó la Fuerza Espacial de Estados Unidos.
Foto de Blue Origin
Competencia con SpaceX en el mercado espacial
El cohete New Glenn de Blue Origin no solo está diseñado para misiones comerciales, sino que también tiene como objetivo posicionarse como una competencia directa para SpaceX, la compañía de Elon Musk que ha dominado el mercado de lanzamientos espaciales durante años. A medida que Blue Origin avanza en el desarrollo de sus tecnologías y en la obtención de contratos de lanzamiento, la competencia en la industria espacial se intensifica.
En junio de 2024, la Fuerza Espacial de Estados Unidos seleccionó a Blue Origin, ULA y SpaceX para competir por contratos de lanzamiento por valor de 5.600 millones de dólares para misiones de seguridad nacional programadas para los próximos cuatro años. Esta competencia pondrá a prueba la capacidad de Blue Origin para cumplir con los exigentes estándares del gobierno de los Estados Unidos.
El futuro del cohete y sus desafíos
A pesar de la cancelación del lanzamiento del cohete New Glenn, la compañía continúa comprometida con su desarrollo y tiene la intención de realizar más pruebas en el futuro cercano. La competencia en el mercado de lanzamientos espaciales es feroz, pero con el respaldo financiero de Jeff Bezos y el continuo trabajo de sus ingenieros, Blue Origin sigue avanzando en su objetivo de convertirse en una de las principales compañías de lanzamiento orbital.