La Casa Blanca informó el jueves que entregaría US$ 1.700 millones para ayudar a convertir instalaciones de fabricación y ensamblaje de automóviles cerradas o en riesgo para fabricar vehículos eléctricos e híbridos.
La financiación se da cuando el crecimiento de las ventas de vehículos eléctricos nuevos se ha desacelerado, incluso cuando la administración Biden quiere mantener competitivos a los fabricantes de vehículos eléctricos estadounidenses frente a una industria china en auge. A principios de este año, el presidente Joe Biden cuadruplicó los aranceles sobre los vehículos eléctricos procedentes de China.
“Este anuncio es un sello distintivo de la estrategia industrial de la administración Biden, que es una estrategia para devolver los empleos manufactureros a Estados Unidos después de años de deslocalización”, dijo a los periodistas la secretaria de Energía, Jennifer Granholm.
Las plantas seleccionadas por el Departamento de Energía para recibir el dinero, que proviene de la histórica Ley de Reducción de la Inflación, cubren ocho estados, incluidos Michigan y Pensilvania.
“La construcción de una economía de energía limpia puede y debe ser beneficiosa para los trabajadores automotrices sindicales y los fabricantes de automóviles. Esta inversión creará miles de empleos manufactureros sindicalizados y bien remunerados y retendrá aún más, desde Lansing, Michigan hasta Fort Valley, Georgia, al ayudar a las empresas automotrices a reequiparse, reiniciarse y recontratar en las mismas fábricas y comunidades”, dijo el presidente Joe Biden en un comunicado.
Los proyectos, según la administración, crearán aproximadamente 2.900 nuevos puestos de trabajo y salvan 15.000 puestos de trabajo que de otro modo se habrían perdido. Entre los beneficiados se encuentran importantes fabricantes de automóviles como GM y Volvo, así como proveedores como American Auto Parts.
Las plantas también incluyen instalaciones que van desde la fabricación de componentes de vehículos hasta el ensamblaje completo de vehículos, según un alto funcionario de la administración.
La medida se produce cuando la tasa de crecimiento de las ventas de vehículos eléctricos se ha desacelerado incluso cuando las ventas totales de vehículos eléctricos han seguido aumentando. La industria, según los expertos, entró en una fase en la que los fabricantes de automóviles luchan por cerrar la brecha entre los primeros usuarios y los consumidores del mercado masivo.
Esto ha llevado a que algunos fabricantes de automóviles se interesen cada vez más en el espacio híbrido, con ventas que incrementan en todo el país y GM y Ford anunciando que planean fabricar más.
Y, en particular, las instalacione