El Super Bowl no solo es el evento deportivo más importante de Estados Unidos, sino también uno de los mayores escaparates publicitarios del mundo. En 2025, los costos de los comerciales durante la transmisión de este icónico partido han alcanzado un nuevo récord, consolidando su estatus como un gigante de la publicidad global.
De acuerdo con Peter Bray, fundador y director creativo de la agencia Bray & Co., para este año se han vendido aproximadamente 51 minutos de tiempo publicitario para la transmisión del Super Bowl. Con una duración estimada de entre tres y cuatro horas, este espacio publicitario podría generar ventas totales de cientos de millones de dólares, una cifra que sigue creciendo año tras año. Bray anticipa que, en el futuro cercano, las ventas publicitarias del Super Bowl podrían superar la barrera de mil millones de dólares, lo que marcaría un hito sin precedentes en la historia de la publicidad.
El impacto de las redes sociales en los anuncios del Super Bowl
Con el auge de las redes sociales, el panorama publicitario ha cambiado considerablemente en los últimos años. Plataformas como TikTok e Instagram han fragmentado las audiencias, haciendo más difícil para las marcas alcanzar grandes públicos de manera simultánea. Sin embargo, el Super Bowl sigue siendo una excepción. Con más de 120 millones de espectadores reunidos en un solo evento, el Super Bowl ofrece una oportunidad única para las empresas que buscan impactar a una audiencia masiva.
Bray destaca que, para competir en este espacio tan competitivo, las marcas buscan crear momentos culturales que resuenen con los espectadores, utilizando estrategias como el humor, la emoción y la participación de celebridades. Este año, la presencia de figuras famosas será más prominente que nunca, con costos que oscilan entre 50.000 dólares para apariciones breves hasta 2 millones de dólares para roles más destacados. Un ejemplo notable es el actor Ben Affleck, quien el año pasado recibió alrededor de 10 millones de dólares por su participación en un anuncio de Dunkin’. En el Super Bowl 2025, Affleck regresa, esta vez junto al actor Jeremy Strong, conocido por su papel en la exitosa serie Succession.
El humor y las estrellas de Hollywood son protagonistas en los anuncios de este año para la Super Bowl.
Meg Ryan y Billy Crystal recrean la popular escena de «Cuando Harry encontró a Sally» para Hellmann’s.
|| Más info👉🏽 https://t.co/4DhfqDfU1z pic.twitter.com/ozaVnzim1Z
— Reason Why (@ReasonWhy) February 7, 2025
La evolución de los costos publicitarios desde 1967
Desde la primera edición del Super Bowl en 1967, los costos publicitarios han experimentado un aumento espectacular. En aquellos primeros años, un espacio publicitario de 30 segundos costaba entre 37.500 y 42.500 dólares, dependiendo de la cadena televisiva. Con el tiempo, el evento fue ganando popularidad, lo que impulsó un crecimiento en los costos de los anuncios. Para 1995, el costo de los comerciales ya había superado el millón de dólares, y para 2017 alcanzó los 5 millones de dólares. Este aumento refleja no solo la creciente popularidad del evento, sino también su capacidad para generar un impacto significativo en las audiencias, un fenómeno que ha ayudado a consolidar al Super Bowl como uno de los eventos publicitarios más importantes del mundo.
El anuncio más caro y el más económico de la historia del Super Bowl
El anuncio más caro de la historia del Super Bowl hasta la fecha fue el comercial de Amazon titulado «Mind Reader«, transmitido durante el Super Bowl LVI en 2022. Este comercial, protagonizado por Scarlett Johansson y Colin Jost, tuvo un costo de producción estimado en 26 millones de dólares, lo que lo convierte en uno de los anuncios más caros de la historia de la televisión. A pesar de la gran inversión, el impacto de este anuncio fue tan grande que se convirtió en un referente de lo que se puede lograr en términos de creatividad y alcance en un evento de tal magnitud.
Por otro lado, el anuncio más económico en la historia del Super Bowl fue el de la startup LifeMinders.com, transmitido en el año 2000. Con un presupuesto inferior a los 5.000 dólares, este anuncio logró atraer a 700.000 visitantes a su sitio web en la semana posterior al evento. A pesar de que la empresa ya no está en funcionamiento, el caso de LifeMinders.com muestra cómo incluso los anuncios de bajo presupuesto pueden generar un impacto considerable si se aprovechan las oportunidades del Super Bowl.
El Super Bowl 2025 no solo será una final histórica entre los Kansas City Chiefs y los Philadelphia Eagles, sino también un escaparate publicitario sin igual, donde las marcas invertirán cantidades astronómicas para captar la atención de una audiencia masiva. Con los costos de los anuncios alcanzando nuevos récords y las redes sociales jugando un papel crucial en la creación de momentos culturales, el Super Bowl sigue consolidándose como uno de los eventos publicitarios más importantes del mundo. De cara al futuro, parece que el evento seguirá creciendo en relevancia, y los costos publicitarios seguirán subiendo, manteniendo su estatus como la máxima plataforma de marketing global.