Tras la fiesta de la Supercopa, Conceição debutó en la Serie A con un decepcionante empate 1-1 contra el Cagliari. Zortea respondió al gol del español.
Las alegrías inolvidables de la Supercopa no se trasladaron a la Serie A para el Milan de Sérgio Conceição. Los rossoneri no pasaron del empate 1-1 contra el Cagliari en el debut liguero del técnico portugués, y suman solo dos victorias en las últimas ocho jornadas del Calcio. Una racha que provocó el despido de Paulo Fonseca y deja a los milanistas en el séptimo puesto, a ocho puntos de la zona Champions, aunque con dos partidos pendientes por disputar.
El Milan disputó una primera parte sin ritmo ni claridad ofensiva, incapaz de asustar a los sardos, que en cambio protagonizaron la ocasión más peligrosa antes del descanso. En el minuto 40, Felici sorprendió con una espectacular rosca zurda que obligó a Maignan a lucirse con una gran intervención para evitar el 0-1. Sin embargo, la noche del portero francés cambió drásticamente en la segunda mitad.
Milán comienza mejor la segunda parte
Los rossoneri comenzaron mejor tras el descanso, golpeando el larguero con un potente disparo de Pulisic, quien también participó en la jugada que dio origen al 1-0. En el minuto 51, tras un pase de Theo Hernández, una volea del estadounidense fue mal rechazada por Caprile, dejando el balón servido para que Morata lo empujara a la red. Fue el sexto gol del delantero español con el Milan.
El 1-0, sin embargo, duró apenas cuatro minutos. En el 55, un error de Fofana en la salida del balón activó un rápido contragolpe del Cagliari que Zortea culminó con un disparo cruzado. El remate, aparentemente manejable, se le escapó a Maignan, que provocó así el empate a uno.
En los últimos 30 minutos, los milaneses intentaron romper la igualdad, pero Caprile se interpuso nuevamente en un disparo de Pulisic. Además, Tammy Abraham, que entró como revulsivo, desperdició dos ocasiones claras frente al arco rival. Sérgio Conceição ya tiene claro que aún queda mucho trabajo por delante para enderezar la complicada temporada del Milan. La fiesta de la Supercopa ya es pasado.