En Francia aseguran que hay fuertes discrepancias con el técnico. Además, los malos resultados en Champions League alteraron el status del club.
El PSG de Luis Enrique está nuevamente bajo el ojo crítico en Francia y sus malos resultados en la Champions League que, por el momento, lo están dejando fuera de los 24 equipos que pasarán a una nueva ronda, están generando una división en el vestuario y las figuras del plantel ya no confían en el entrenador español.
En la previa a la antepenúltima jornada del torneo más importante de la UEFA, los medios parisinos ventilaron las internas en el club que está como único líder de la Ligue 1 con siete puntos de ventaja sobre el Olympique de Marsella, pero que en Champions deberá vencer al Salzburgo, en Austria, el martes 10 de diciembre, si no quiere llegar a una situación desesperante y posiblemente sin retorno.
El diario L’Equipe cargó las tintas contra Luis Enrique y en uno de sus artículos se pregunta si el ex entrenador del Barcelona y la selección de España está perdiendo las riendas del vestuario por sus actitudes con los jugadores y por “estar cerrado a los cambios”.
Dos de los futbolistas que avivaron el fuego interno en PSG, según el medio francés, son Ousmane Dembelé y Presnel Kimpembe. “No están en sintonía con el entrenador y son los más enojados”, aseguran. Cada uno tiene un motivo distinto para discrepar con Luis Enrique, pero no son los únicos. El artículo cita un textual proveniente desde adentro del plantel, aunque no reveló la identidad del remitente: “Es bueno hablando en ruedas de prensa y lanzando grandes frases contra sus propios jugadores. Pero, en la cara, siempre es más amable con lo que te dice. Puede, por ejemplo, consolar a un jugador tras una mala actuación y criticarlo unos minutos después en conferencia. Tiene dos personalidades molestas”.
Otro de los puntos que exaspera a los jugadores del plantel de un club dominante en su liga local, pero ineficiente en las competencias internacionales, es la actitud que tendría el asturiano para imponer su idea. “Hay futbolistas que firmaron su acuerdo y que hoy no están contentos. De hecho, cuando los jugadores empiezan a ganar peso, algo de protagonismo e influencia, no le gusta nada”, mencionó otra de las fuentes consultadas por L’Equipe.
Saliendo del terreno de juego, los problemas hacia esferas más altas agudizan la crisis que vive el PSG. El club de la Torre Eiffel supo tener entre sus filas a grandes figuras del fútbol en el último tiempo como Neymar, Lionel Messi, Sergio Ramos o Kylian Mbappé, gracias a sus patrocinantes. Pero alguno de éstos ya no ven con buenos ojos seguir invirtiendo en París. Según el medio galo, las autoridades del club prevén un aumento del presupuesto de un 5%, pero no estaría contemplada una temprana eliminación en Champions, que complicaría las cuentas.
Además, el poco entusiasmo del público ante la falta de estrellas en el plantel preocupa a la hora de llenar el Parque de los Príncipes. “Ya no puedo revender mis entradas y, cuando es así, el precio se divide entre dos o tres respecto a la era Messi”, dijo un abonado citado por el diario francés. El informe agrega también que las visitas guiadas al estadio han disminuido, pese a que en el club informen lo contrario.
La sangría se extiende a las tiendas oficiales del PSG, en las que aseguran que se venden menos camisetas. La misma dirección va hacia las redes sociales. “Dice ser el club de la nueva generación, pero se topa con la forma de consumir de gente más joven, más apegada a un jugador que a un club. Desde las salidas de Messi y Neymar, el campeón de Francia perdió 7 millones de suscriptores en Instagram y desde principios de año, 200.000 se han ido cada mes”, indicó el medio sembrando la preocupación por un gigante de su país, que no logra dar el salto: “El PSG sueña menos en grande”.