El Bayer se dejó empatar pero un penalti de Itakura a Adli en la última hizo que Wirtz, que falló el lanzamiento, marcara en el rechace.
Quien no lo haya visto, no lo podrá creer. La historia del ‘Neverlusen’ se extiende en este nuevo inicio de Bundesliga y, como no podía ser de otra manera, con triunfo sobre la bocina sobre el Borussia Monchengladbach con un tanto de Wirtz en el 101′ tras recoger su propio rechace de penalti fallado (2-3). Ya van 41 consecutivos sin conocer la derrota contra un club germano.
La carta de presentación del Leverkusen era con un once totalmente reconocible. Ningún fichaje sobre el césped, tampoco Aleix García, que aun así apunta a poder ser importante. Wirtz, Xhaka, Grimaldo y compañía, los encargados de hacer campeón a los de Xabi Alonso la temporada pasada, formaron parte de un once que buscará confirmar que no se trató de una sorpresa.
Al menos eso es lo que se vio en la primera mitad. Con aura de equipo campeón, el Leverkusen golpeó primero y con fuerza. Es más, pudo incluso dejar sentenciado al Gladbach, que avisó primero con tiro de Weigl, en el primer tiempo. Xhaka hizo buena la ley del ‘ex’, porque fue el encargado de marcar el primer tanto del Bayer en esta Bundesliga con un zapatazo marca de la casa que casi ni vio venir Omlin (12′). Un tanto que lleenó de confianza al equipo que, aunque Hradecky salvó el empate en la siguiente, impuso su ritmo y su juego.
El mayor enemigo de los de Xabi Alonso fue la madera. Primero el larguero y luego la cruceta, evitaron los golazos de Boniface y Tapsoba en cuestión de escasos minutos. El segundo, de entrar, bien podría haber sido el tanto de la temporada en la Bundesliga al ser desde más de 30 metros. Sí que acertó Wirtz para doblar la ventaja. Estuvo vivo al recoger el rechace de un disparo de Grimaldo para anotar con su zurda (38′).
Aun así, se fue el Leverkusen con aviso a navegantes al descanso. Marcó Kleindienst de cabeza desde el suelo pero, aunque valió en primera instancia, el punta había hecho falta justo antes a Hincapié, al que golpeó abajo, por lo que no subió al marcador. Tras el descanso y un receso de varios minutos por el humo de las bengalas, el Bayer dominó y no se vio afectado, pero no contó con el poderío en la estrategia del Gladbach. Elvedi, a la segunda tras una mano espectacular de Hradecky (59′), complicó las cosas al campeón.
Era el momento de demostrar la mentalidad ‘made in’ Xabi Alonso. Y vaya si se hizo. Lejos de echarse atrás, el defensor de la corona decidió dar un paso al frente y el siguiente tanto estuvo más cerca de caer de su lado. Terrier y Boniface, algo desesperado, tuvieron bien pronto las primeras, con el Bayer jugando en todo momento en el campo del Gladbach.
Pero el fútbol es caprichoso y el Borussia no estaba tampoco para figurar. Una jugada aislada y muy mal defendida por el Leverkusen, y especialmente por Tapsoba, dio la ventaja a Kleindienst, que desde el suelo firmó el empate (85′).
Con pundonor, la cosa no podía quedar así. Al menos eso intentó el Bayer, que el año pasado fue un experto en marcar en los últimos minutos y aprovechando el largo descuento quiso reaccionar. Y llegó un milagro más. Este de penalti de VAR, tras enganchar Itakura a Adli. Momento para el mejor, Wirtz, que tras fallar su lanzamiento recogió el rechace y llevó al Leverkusen a la victoria (101′).