El primer gol profesional de Caleb Wiley fue un momento inolvidable.
Era domingo en Atlanta y los hinchas se congregaban en el Mercedes-Benz Stadium para el inicio de la temporada 2022 de la MLS. Atlanta United recibía al Sporting Kansas City para el partido inaugural en casa. La expectación crecía a medida que comenzaba la nueva temporada.
Y el partido no decepcionó. Unas 67.523 personas presenciaron una contundente victoria de 3-1 para el equipo de las 5 Rayas.
También fueron testigos de un momento histórico para uno de los suyos.
Minutos después de entrar al partido, en su debut con el primer equipo , Wiley marcó. Mientras era felicitado por sus compañeros, detrás de él, el zaguero Andrew Gutman señaló a Wiley, como si dijera “Mírenlo, es suyo”, lo que le permitió al joven de 17 años ser el centro de atención en el gran escenario.
Wiley afrontó el momento con humildad y entendiendo de dónde venía. Formó con sus manos la forma de un corazón y lo levantó hacia las rugientes gradas. Luego, lanzó un beso a la multitud y levantó los brazos hacia el techo cerrado del Mercedes-Benz Stadium.
Entregó su amor a la ciudad que lo crió.
“Esto demuestra cuánto amo a esta ciudad y a este club”, dijo Wiley después del partido. “Me han dado tanto, así que es una forma de devolverles algo. Fue un momento muy especial para mí hacerlo frente a estos increíbles fanáticos, amigos y familiares. Fue algo muy especial”.
El gol fue legendario. Le permitió a Wiley conocer la MLS y a aquellos en Atlanta que quizás no habían visto jugar a este joven zaguero antes.
Pero este no fue el comienzo de la historia de Wiley.
De recogepelotas a las 5 rayas
Uno de los momentos más importantes en la trayectoria de Atlanta United en la MLS fue 2018. En solo dos años, el club había alcanzado la cima de la liga y estaba compitiendo por un trofeo.
La Copa MLS.
Atlanta United fue el campeón de la Conferencia Este. Dio la casualidad de que la Copa MLS se estaba jugando en el Mercedes-Benz Stadium, el estadio local del Atlanta United. Una oportunidad perfecta para que el equipo de expansión se adjudicara su primer campeonato y el primer título profesional de la ciudad desde 1995.
Y ese día, Caleb Wiley era recogepelotas.
En aquella época, los equipos de la Academia eran los únicos que ofrecían servicios de recogepelotas en los partidos del primer equipo, por lo que a la tierna edad de 13 años, Wiley comenzó a trabajar en la cancha.
Atlanta United levantó el trofeo ese día, al vencer a Portland por 2-0 el 8 de diciembre de 2018. Es un día que los 17 recuerdan con cariño, con orgullo, alegría y todas las emociones. El comienzo de una carrera increíblemente exitosa en la historia del club que incluyó la Campeones Cup y la Lamar Hunt US Open Cup.
Y Wiley lo presenció todo de primera mano: el primer título profesional en Atlanta en su vida.
“Es una locura verme pasar de ser recogepelotas y recuerdo el día en que ganamos la Copa MLS”, dijo. “Estaba tan emocionado, era la primera vez que sentía lo que era ganar, y luego pude experimentarlo jugando para el primer equipo”.
Aun así, incluso en 2018, la historia de Wiley no comenzó ahí.
La historia de Wiley comienza en Atlanta. Su familia, su ciudad, su barrio, su hogar.
Nació el 22 de diciembre de 2004 aquí en Atlanta. Creció en Morningside, un barrio al noreste de Piedmont Park y al oeste de Decatur. Comenzó a jugar al fútbol en el patio trasero de su casa, con sus padres, Chris y Jenn, mirándolo. Continuó jugando en la YMCA y en los parques locales.
El momento era el adecuado. Justo cuando Wiley se estaba volviendo más serio y más enamorado del fútbol, la MLS anunció que traería un club profesional a Atlanta. Y eso significaba más que un primer equipo. Instalaron un sistema de desarrollo juvenil donde los chicos locales podían crecer en el deporte y jugar de manera competitiva, conocido como la Atlanta United Academy.
Los cazatalentos identificaron su talento y Wiley se unió a la Atlanta United Academy en 2016 a la edad de 11 años como miembro del equipo inaugural U-12 del club.
Y eso fue sólo el principio.
Wiley progresó en la Academia. Hizo su debut profesional el 11 de julio de 2020 con Atlanta United 2. A los 15 años y 206 días, se convirtió en el jugador más joven en la historia del club en aparecer en un juego profesional. Wiley jugó 11 partidos en 2020, todos como titular, y terminó con 910 minutos jugados. Como zaguero, lideró a los 2 con 25 intercepciones esa temporada.
“Simplemente tratamos de darle la oportunidad a Caleb”, dijeron sus padres, Chris y Jenn. “Él ama el juego, así que tratamos de ponerlo en ese camino, apoyarlo y dejarlo hacer lo que hace y lo que ama. Para la Academia, es genial porque realmente puedes verlo y saber que puede funcionar”.
En enero de 2022 firmó su contrato como canterano con el primer equipo apenas un mes después de cumplir 17 años. Se convirtió en miembro del primer equipo y se unió a la plantilla del entrenador Gonzalo Pineda para los entrenamientos de pretemporada, liderando el camino hacia ese mágico debut.
En el camino, Wiley encontró el apoyo de Atlanta United. El director de la academia, Matt Lawrey, lo conocía desde que tenía 10 u 11 años y era su entrenador. Tony Annan, quien se unió originalmente al club en 2016 y se desempeñó durante cinco años como director de la academia, exploró a Caleb y le dio esa oportunidad inicial con el equipo sub-12. Annan luego entrenó a Caleb nuevamente cuando fue nombrado entrenador en jefe interino de Atlanta United 2.
Otras influencias incluyen al ex entrenador del Atlanta United 2, Jack Collison, y al actual entrenador interino, Rob Valentino.
“Ha sido un viaje muy agradable”, dijo Wiley. “Un viaje muy duro y de mucho trabajo. Pero ellos son los que lo han hecho más fácil, junto con mi familia y amigos que siempre me han apoyado”.
“El apoyo que ha recibido de los líderes y los entrenadores del club ha sido muy importante”, dijo su padre, Chris Wiley. “Eso ha sido muy importante para Caleb, simplemente el apoyo que ha recibido de esos entrenadores. Es extremadamente humilde y se esfuerza al máximo”.
Pocos han hecho lo que Wiley ha logrado. George Bello, quien también se unió a la Academia en 2016, unos años mayor que Caleb , se abrió camino hasta convertirse en profesional. Con el tiempo, Wiley se convirtió en el modelo a seguir. La temporada pasada, Wiley estableció el récord de más apariciones en la MLS para un jugador de Atlanta United Homewright. Mostró a los jóvenes de la Academia quiénes podían ser.
«He estado cerca de Caleb durante los últimos tres o cuatro años y, con solo ver cómo trabaja todos los días, definitivamente se merece esta oportunidad», dijo su compañero de Homegrown Noah Cobb. «Definitivamente, para el resto de nosotros, los Homegrowns, esto hace que parezca más real y que, si ese es tu objetivo, entonces es alcanzable».
Un sueño realizado y mucho más por delante
Wiley ha lucido muchos uniformes y muchos colores para los 5 Rayas. Usó el uniforme BLVCK, el uniforme Forest, el 17s’ y el Resurgens. Formó parte del grupo que lanzó el uniforme 404 y contribuyó a la Colección Legacy liderada por jugadores que se lanzó en junio pasado. Usó la indumentaria del Día 404, junto con sus homólogos de la cantera Noah Cobb y Jay Fortune.
Durante su estancia en Atlanta, también llevaba consigo muchos sueños. Uno de esos sueños, el más ambicioso aún por cumplir: jugar en Europa.
El 22 de julio, el club anunció que Wiley había sido transferido al Chelsea, un club de la Premier League inglesa. El equipo de la EPL no ha contado con muchos jugadores estadounidenses en su historia, pero uno de los que figura en la lista es quizás uno de los futbolistas estadounidenses más famosos del mundo: el capitán de la selección nacional masculina de Estados Unidos, Christian Pulisic.
Wiley se mudará al extranjero y jugará con y contra algunos de los mejores jugadores del mundo. Para este joven de 19 años, es un sueño hecho realidad.
Qué honor para Wiley ser codiciado por un equipo de una de las mejores ligas del mundo. Es un testimonio de su arduo trabajo y de su educación. Muestra lo que es posible a través de la humildad y el trabajo duro, honrando a los que vinieron antes y escuchando a aquellos con quienes trabajamos todos los días. Mientras da el salto a jugar para un club lejos de casa por primera vez en su vida, Atlanta estará observando. Estaremos alentando al chico de Morningside, alentándolo mientras crece, compite y nos enorgullece.
Porque sabemos esto: Atlanta United es sólo el comienzo de su historia.
