F1. A partir de 30.5 grados deberán llevar el obligatoriamente un kit, de 5 kilos de peso, capaz de bajar hasta 4.4 grados el calor corporal. Se probó en secreto en 2024 con buenos resultados.
Fernando Alonso y Charles Leclerc, que se sepa, han sido algunos de los pilotos que probaron el primer sistema de ‘aire acondicionado’, en realidad de refrigeración para los pilotos en la Fórmula 1. Lo hicieron el año pasado, sobre todo en los primeros libres del Gran Premio de México y el resultado, según el monegasco, fue bueno: cómodo, y sin problemas al volante.
Las últimas estampas dantescas, sobre todo en carreras como Singapur o Qatar, con muchos pilotos teniendo que ser evacuados de los coches, o algunos tumbados en la sala de refrigeración previa al podio, elevó las alarmas de la FIA que empezó a buscar un proveedor para el año que viene. El Dakar ya tiene A/A (aunque algunos pilotos lo quitan para bajar de peso el coche), Le Mans lo tiene obligatorio desde 2007, pero la F1, donde cada gramo es un drama, no tenía nada.
F1 aire acondicionado
Y el sistema ya está listo, aunque cada equipo lo puede personalizar en 2025 con sus propias patentes siempre que produzcan el mismo efecto y se utilice aire, agua o determinados productos químicos diluidos en agua para mejorar la conductividad térmica.
Así el reglamento de la F1 en 2025 obligará a usar estos sistemas cuando la temperatura de la pista en carrera supere, o se espere que pueda superar, los 30.5 grados, que suelen suponer 15 ó 20 más en la cabina, y se comunicará a los equipos 24 horas de la carrera o la Sprint Race.
Para ello permitirá elevar el límite de peso de 800 a 805 kilos, ya que el sistema, desarrollado por la empresa estadounidense Chillout Motorsport, por ahora pesa eso, unos 5 kilos entre microcompresor, evaporador y una unidad de condensación, para mantener frío el líquido, y conectados a lo más llamativo, una camiseta interior bajo el mono con ¡48 metros de tubos refrigerados cosidos! que envuelven en miniatura tanto el pecho como la espalda del piloto.
El sistema asegura que absorbe hasta 4,4 °C de exceso de calor al pasar de un sólido a un líquido, lo que ayuda a enfriar el cuerpo sin sistemas de refrigeración activos voluminosos o engorrosos. La temperatura esperada a la que trabaja serán unos 15º y según Leclerc, que fue uno de los que lo probó, transmitió a la FIA que ojalá pudiera usarlo todas las carreras porque era cómodo y se notaba el fresco.
Hasta ahora todo era hielo seco (prohibido en el nuevo sistema) en la cabina antes de la carrera, chalecos de hielo ostentosos y saunas de vapor de hielo, baños helados tras la carrera… pero duraba poco y cuando el cuerpo supera los 38 grados, baja mucho el rendimiento y la concentración, lo que subido a un F1 es un riesgo muy grande.
Chillout es de momento la empresa que tiene la delantera, con experiencia en NASCAR, WEC y en refrigerar las baterías de la Fórmula E (los usan también pilotos en aviones militares y los astronautas) y este sistema miniaturizado, envuelto en fibra de carbono y que les ha hecho sudar la gota gorda para pasar los test ignífugos de la FIA. En 2026 será todo más sencillo ya que los nuevos coches, más eléctricos, cargarán estos sistemas que por ahora cada equipo encajará donde pueda.