Bravos de Atlanta ya están tomando decisiones clave para la temporada 2025.
La renovación de los contratos de Marcell Ozuna y Travis d’Arnaud será crucial para el futuro del equipo.
El fin de la temporada 2024 para los Atlanta Braves llegó antes de lo esperado, después de ser barridos por los San Diego Padres en la Serie de Comodines de la Liga Nacional. Un final abrupto para un equipo que, si bien tuvo una temporada regular decente con un récord de 89-73, no cumplió con las expectativas de avanzar en los playoffs. Sin embargo, con la eliminación ya en el pasado, la organización ha puesto su mirada en el futuro y ha tomado decisiones contractuales que podrían definir su rendimiento en 2025.
Dos de las figuras más importantes de la alineación de los Braves, Marcell Ozuna y Travis d’Arnaud, han asegurado su lugar en el equipo para la próxima temporada. La gerencia de Atlanta optó por ejercer las opciones de contrato de ambos jugadores, una decisión que, aunque previsible, deja mucho para analizar en términos de lo que significa para el equipo de cara al próximo año.
Marcell Ozuna ha sido uno de los jugadores más consistentes y productivos de los Bravos de Atlanta durante 2024. A sus 33 años, el dominicano firmó una de sus mejores temporadas al batear para .302, con 39 jonrones y 104 carreras impulsadas. Estos números lo colocaron entre los mejores bateadores de la Liga Nacional: tercero en promedio de bateo, segundo en cuadrangulares y cuarto en impulsadas. Fue un bateador designado indiscutible, jugando los 162 partidos de la temporada regular en esa posición.
Para los Braves, dejar ir a Ozuna habría sido un grave error. Su poder ofensivo y capacidad para remolcar carreras lo convierten en una pieza clave en el corazón de la alineación. No solo eso, sino que su consistencia le otorga a Atlanta una ventaja competitiva en un momento en el que otros equipos de la división están buscando formas de mejorar sus plantillas. Con un salario de $16 millones para la próxima temporada, la inversión en Ozuna parece justificada.
Sin embargo, es importante destacar que Ozuna ha enfrentado controversias fuera del campo en años anteriores, lo que afectó temporalmente su reputación. A pesar de esos problemas, ha demostrado ser un profesional que sigue comprometido con el equipo y su desempeño en 2024 lo respalda. La pregunta ahora es si podrá replicar o mejorar esos números en 2025, especialmente considerando que, como bateador designado, su contribución está exclusivamente ligada a su rendimiento en el plato.
Por otro lado, la decisión de renovar el contrato de Travis d’Arnaud también tiene un fuerte componente estratégico. Aunque sus números no fueron tan espectaculares como los de Ozuna, el receptor tuvo una temporada sólida dividiendo los deberes con Sean Murphy, especialmente hacia el final del año, cuando se convirtió en la opción preferida del manager Brian Snitker. Con un promedio de .238, 15 jonrones y 48 carreras impulsadas en 99 juegos, d’Arnaud sigue siendo una figura clave en el vestuario y un líder respetado por sus compañeros.
El valor de d’Arnaud va más allá de sus estadísticas ofensivas. Su conocimiento de los lanzadores de los Braves y su experiencia detrás del plato lo convierten en un elemento indispensable para la rotación de Atlanta, que podría enfrentarse a cambios importantes en 2025 si Max Fried, quien será agente libre, decide firmar con otro equipo. La capacidad de d’Arnaud para manejar el cuerpo de lanzadores será crucial si los Braves pierden a su as zurdo.
El salario de $8 millones que percibirá d’Arnaud el próximo año es razonable para un receptor veterano que aporta tanto dentro como fuera del campo. Su durabilidad y disposición para compartir tiempo de juego con Murphy le permiten a los Braves contar con profundidad en una posición clave, un lujo que pocos equipos pueden darse.
Con la renovación de Ozuna y d’Arnaud, los Bravos de Atlanta aseguran dos piezas importantes para la temporada 2025. No obstante, el equipo aún enfrenta incertidumbres, especialmente en el aspecto de su rotación de lanzadores. Max Fried, quien ha sido un baluarte en el montículo de Atlanta, se convertirá en agente libre este invierno y podría buscar un contrato millonario en otro equipo. La posible partida de Fried dejaría un vacío difícil de llenar, y aunque los Braves cuentan con jóvenes promesas en su rotación, perder a un lanzador de la calidad de Fried podría tener un impacto significativo en las aspiraciones del equipo para la próxima temporada.
Además, el fracaso en los playoffs de 2024 ha dejado claro que los Braves necesitan hacer ajustes más allá de renovar contratos clave. El equipo tendrá que reforzar su bullpen y posiblemente buscar más profundidad en su alineación para evitar depender en exceso de figuras como Ozuna y Ronald Acuña Jr. La temporada baja será un período crucial para que la gerencia de Atlanta construya un equipo capaz de competir no solo en la temporada regular, sino también en la exigente postemporada.
La renovación de los contratos de Marcell Ozuna y Travis d’Arnaud marca el comienzo de un período de ajustes para los Atlanta Braves. Si bien ambos jugadores han demostrado su valía y seguirán siendo piezas fundamentales en 2025, el equipo tiene varios retos por delante. Desde la posible partida de Max Fried hasta la necesidad de mejorar en áreas clave, los Braves deberán actuar con inteligencia en la temporada baja para mantenerse como contendientes en la Liga Nacional.
La próxima temporada se vislumbra como una en la que Atlanta buscará redimirse después de una decepcionante eliminación en 2024. Con Ozuna y d’Arnaud de vuelta, el equipo tiene una base sólida, pero necesitará mucho más para alcanzar la gloria que tanto ansían.