El Atlético de Madrid no logró aprovechar su oportunidad para ponerse líder de la La Liga, cayendo por 2-1 ante el Getafe en un partido que marcará la temporada. El equipo de Diego Simeone, que había mostrado ciertas esperanzas con un gol de Sorloth de penalti, desperdició una ventaja que parecía segura cuando, en los últimos tres minutos del partido (89-92), Mauro Arambarri anotó un doblete que remontó un 0-1 en contra. El Getafe celebró con justicia poética tras más de una década sin vencer al Atlético, mientras que el equipo colchonero se hundió en uno de sus peores partidos de la temporada.
Penalti polémico y el gol de Sorloth
La primera mitad estuvo marcada por la falta de verticalidad y la ausencia de chispa en el Atlético de Madrid. Con un Getafe replegado, el equipo de José Bordalás había conseguido frenar el ataque rojiblanco con una táctica bien definida: espera paciente, toques cortos y sin desespero. El Atlético, en cambio, estuvo desdibujado, sin ideas claras en ataque, y su jugada más peligrosa fue un disparo de Antoine Griezmann que fue fácilmente detenido por David Soria, portero del Getafe.
Sin embargo, el partido dio un giro en el minuto 75, cuando Alderete fue sancionado con un penalti por una mano en el área tras un remate de Le Normand. El VAR intervino y el árbitro, Cuadra Fernández, no dudó en señalar el punto blanco. La decisión fue polémica, pues muchos consideraron que la mano de Alderete fue involuntaria. Sin embargo, Alexander Sorloth transformó el penalti con tranquilidad, poniendo al Atlético de Madrid por delante y parecía que el equipo de Simeone podía llevarse los tres puntos.
«Siempre es difícil venir a jugar a Getafe: el campo es pequeño, la hierba alta, son muy buenos en defensa…» 🔊
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El Getafe se rehace y se lleva la victoria
El Atlético se fue arriba con la esperanza de que el gol de Sorloth bastara para asegurar la victoria, pero el Getafe no tiró la toalla. José Bordalás había renunciado a la presión alta que caracteriza a sus equipos, pero al ver que el Atlético estaba en su peor momento, el Getafe aprovechó los últimos minutos para echarse al ataque con intensidad.
En los últimos compases, el Atlético cometió varios errores que terminaron costándole la victoria. Primero, Ángel Correa cometió una entrada imprudente sobre Djené, que le costó la tarjeta roja directa (84′). Con un hombre menos, el Atlético se vino abajo. En ese momento, Mauro Arambarri, quien ya había estado muy activo durante todo el encuentro, asumió el protagonismo. El centrocampista uruguayo aprovechó dos oportunidades en los últimos minutos: primero, en el 89′, disparó desde fuera del área, venciendo a Jan Oblak con un remate potente y preciso. Luego, a los 92′, con el Atlético completamente desorganizado y con la defensa ya exhausta, Arambarri volvió a encontrar espacio en el área y selló la remontada con otro gol que dejó sin respuesta al equipo de Simeone.
La estrategia de Bordalás: paciencia y oportunidad
El partido parecía estar bajo control del Atlético después del gol de penalti, pero el planteamiento táctico de José Bordalás resultó clave. Su estrategia de esperar al Atlético y explotar los espacios en los últimos minutos le dio frutos. Con los cambios de Mayoral y el crecimiento de Coba en el ataque, el Getafe aprovechó al máximo la oportunidad que le brindó el cansancio y los errores del Atlético.
Termina el partido. pic.twitter.com/DI0OCwuWrv
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El Atlético de Madrid paga caro su falta de intensidad
A pesar de las ausencias de Giménez y Pablo Barrios, que Simeone dejó en el banquillo para darles descanso, el Atlético de Madrid no mostró la intensidad necesaria para afrontar este partido. Nahuel Molina y Marcos Llorente, a pesar de estar en sus posiciones habituales, no lograron marcar la diferencia. El equipo no pudo controlar el centro del campo ni imponerse a un Getafe que, pese a ser inferior en términos de plantel, aprovechó mejor las circunstancias.
La salida de Simeone no logró ser la esperada. A pesar de los cambios realizados, como el ingreso de Correa y Barrios para dar más agresividad al ataque, el equipo no encontró respuesta a los movimientos tácticos del Getafe. Sorloth, que había anotado el gol del 0-1, no pudo hacer mucho más. El equipo fue incapaz de sostener la ventaja y terminó pagando caro la falta de ideas y la falta de control.
El calendario se aprieta para el Atlético
Este tropiezo dejó al Atlético de Madrid fuera de la lucha por el liderato, justo antes del crucial derbi contra el Real Madrid en la Liga de Campeones. Con el empate del Real Madrid ante el Rayo Vallecano, el Atlético tenía la oportunidad de tomar la delantera en La Liga, pero no supo aprovecharla. Ahora, con el derbi a la vuelta de la esquina, la presión sobre Simeone y sus jugadores crece. Este tipo de derrotas podría poner en peligro la moral del equipo en una temporada donde se juegan todos los títulos.
El Atlético ya no puede permitirse más tropiezos si quiere mantenerse en la lucha por el campeonato. Después de perder ante el Getafe, el equipo de Simeone deberá hacer frente a un calendario muy exigente, con duelos directos que podrían decidir su futuro en la liga y en Europa.