Según las políticas migratorias implementadas por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, un promedio de 135 migrantes indocumentados son expulsados y repatriados diariamente a México. Estos traslados se realizan bajo estrictos protocolos de seguridad y después de que los migrantes pasan algunos meses en prisión, cumpliendo con las leyes estadounidenses. Este procedimiento ha generado una gran cantidad de comentarios y reacciones, especialmente por las condiciones en las que los migrantes son trasladados de vuelta a su país.
El proceso de repatriación de migrantes a México
En una reciente entrevista para El Sol de México, Ricardo Moreno, subdirector Ejecutivo de la Dirección de Operaciones de Aplicación de la Ley de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos, detalló cómo se llevan a cabo los vuelos de deportación de mexicanos y otros migrantes, así como los procesos judiciales que se siguen en Estados Unidos. Moreno explicó que, en su mayoría, las deportaciones de migrantes, no solo mexicanos, sino también de otras nacionalidades como Guatemala, Honduras y Venezuela, se realizan con el máximo respeto a la seguridad tanto de los migrantes como de los oficiales a cargo del traslado.
“Los agentes tratan a todo migrante como se debe tratar en un vuelo de repatriación. Hemos repatriado a más de 4,000 personas al interior de México. También hemos enviado migrantes a otros países como Guatemala, Honduras, Venezuela, entre otros”, indicó Moreno en su declaración. El funcionario destacó que la seguridad durante el vuelo es crucial para evitar incidentes y proteger a todos los involucrados en el proceso.
En esta imagen de archivo activistas pintan un mural con rostros de migrantes deportados en Ciudad Juárez (México). EFE/ Luis Torres
La postura del presidente Trump sobre la migración irregular
El presidente Donald Trump, mediante sus órdenes ejecutivas, ha subrayado la importancia de frenar la entrada irregular a Estados Unidos. Según Moreno, el mensaje del gobierno estadounidense es claro: aquellos que deseen ingresar a los Estados Unidos deben hacerlo a través de los puentes internacionales y de forma legal. Este enfoque es parte de la estrategia del gobierno de Trump para regularizar la migración y desalentar el cruce ilegal de la frontera.
“El mensaje, yo creo, es claro, el presidente Trump con las órdenes ejecutivas que nos ha dictado es que ya no se haga la entrada irregular. Si alguien tiene una razón para entrar a los Estados Unidos, se debe entrar por el puente internacional, de manera legal”, agregó el subdirector.
Medidas de seguridad y derechos humanos durante los vuelos de repatriación
Uno de los puntos más sensibles en el proceso de deportación es el uso de medidas de seguridad para evitar cualquier tipo de incidente durante los vuelos hacia territorio mexicano. A menudo, los migrantes son trasladados con esposas, lo que ha generado controversia y críticas por parte de grupos defensores de los derechos humanos. Sin embargo, Ricardo Moreno defendió estas medidas, asegurando que están diseñadas para proteger la integridad de los migrantes, los oficiales encargados del traslado y los pilotos.
“Eso es para la seguridad de todos, ya sea la seguridad de los migrantes, la seguridad de los pilotos y la seguridad de los oficiales. Para que no haya ningún tipo de incidente durante el vuelo”, explicó el funcionario estadounidense. Esta medida, aunque polémica, se justifica bajo la premisa de mantener el orden y la seguridad en vuelos que, en ocasiones, pueden ser tensos debido a la situación de los migrantes.

Migrantes deportados son trasladados a albergues en el puerto fronterizo de El Chaparral en Tijuana (México). EFE/ Joebeth Terríquez
Denuncias de migrantes deportados por la administración de Trump
A pesar de los esfuerzos por garantizar la seguridad de los migrantes durante los vuelos de repatriación, muchos de los migrantes deportados han denunciado abusos y maltratos durante su tiempo en las cárceles estadounidenses antes de ser expulsados. Según un informe de El Sol de México, algunos migrantes han asegurado que fueron mantenidos en prisión durante varios días, esposados y sin acceso adecuado a servicios de salud.
Aunque el gobierno de México ha negado que se hayan violado los derechos humanos de los migrantes deportados, dos casos de presuntas violaciones han sido documentados: uno de un mexicano y otro de una guatemalteca. El gobierno mexicano ha prometido defender a los connacionales que regresan de Estados Unidos y garantizar su bienestar en el proceso de repatriación.
El retorno de migrantes y las medidas del gobierno mexicano
Una vez que los migrantes son deportados y llegan a México, son recibidos en el Centro de Atención de Deportados en Tijuana, a solo 15 kilómetros del puerto fronterizo El Chaparral. Ahí, los migrantes pasan un par de días antes de ser transportados a sus lugares de origen. En muchos casos, la atención en este centro es proporcionada por las autoridades mexicanas para ayudar a los deportados en su reintegración, aunque también se han presentado críticas sobre las condiciones de estos albergues.
Moreno explicó que, aunque la repatriación de migrantes es una obligación para el gobierno de Estados Unidos, también se trabaja de cerca con las autoridades mexicanas para asegurar que el regreso de los migrantes sea lo más seguro posible. “La entrada ilegal es muy peligrosa; queremos que los migrantes no tomen esos riesgos y lleguen aquí y que sean condenados. Si tienen alguna razón para entrar, que entren por el puente internacional”, agregó Moreno.