Las autoridades israelíes suspendieron este domingo la entrada de ayuda humanitaria a la Franja de Gaza tras la expiración de la primera fase del acuerdo de alto el fuego entre Israel y Hamás, una medida que el grupo islamista ha calificado como un «intento flagrante de evadir el acuerdo y evitar entrar en negociaciones para la segunda fase».
«Con el final de la fase 1 (…), el primer ministro Netanyahu ha decidido que, a partir de esta mañana, toda entrada de bienes y suministros a la Franja de Gaza cesará», anunció la oficina del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu. Este anuncio ha generado una creciente tensión en la región, ya que la suspensión de la ayuda afecta a miles de civiles que dependen de la asistencia humanitaria.
Tensión en Gaza: Israel suspende la entrada de ayuda humanitaria
El cierre de la entrada de ayuda humanitaria se produce después de que el acuerdo de alto el fuego alcanzado entre Israel y Hamás llegara a su fin. Según el gobierno israelí, la decisión fue tomada debido a que Hamás no aceptó el borrador de Witkoff para continuar las conversaciones. Este borrador, elaborado por el enviado especial de Estados Unidos, Steve Witkoff, proponía extender la primera fase del alto el fuego durante el mes de Ramadán a cambio de la liberación de la mitad de los rehenes vivos y muertos aún retenidos en Gaza.
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, no tardó en advertir a Hamás que «no habrá comidas gratis». En un mensaje transmitido al inicio de una reunión de su gabinete, Netanyahu subrayó que cualquier intento de extender el alto el fuego sin acuerdos claros sobre los rehenes sería inaceptable para Israel. La declaración del primer ministro generó fuertes críticas por parte de Hamás, que considera la suspensión de la ayuda como un «chantaje barato» y una violación del acuerdo.
Hamás responde: acusaciones de chantaje y violación del acuerdo
El grupo islamista no tardó en emitir un comunicado donde calificaba la decisión de Israel de suspender la ayuda humanitaria como un acto de «chantaje barato». Además, Hamás insistió en que la suspensión de la ayuda constituye un «crimen de guerra» y una clara violación del acuerdo de alto el fuego firmado entre ambas partes. Según la organización palestina, la propuesta israelí de alargar la primera fase del alto el fuego sin pasar a la segunda fase es un intento de evitar las negociaciones que deberían haberse llevado a cabo para resolver los términos de la tregua.
Hamás reafirmó su compromiso con la implementación del acuerdo en sus tres etapas y su disposición para continuar con las negociaciones sobre la segunda fase del alto el fuego. Sin embargo, las diferencias entre ambas partes parecen ser insalvables, lo que agrava aún más la situación en la Franja de Gaza, que sigue lidiando con los devastadores efectos del conflicto.
Ataques israelíes en Gaza tras el fin de la tregua
La situación en Gaza se ha intensificado tras la expiración de la primera fase de la tregua. El Ejército israelí lanzó nuevos ataques en la Franja, matando al menos a cuatro personas en diferentes localidades de Gaza. Entre las víctimas se encuentran dos personas que perdieron la vida en un ataque con dron en la localidad de Beit Hanún, en el norte de Gaza; una mujer que murió en un ataque en Jan Yunis, en el sur; y un joven que fue alcanzado por un francotirador israelí en Rafah, en el extremo sur del enclave.
El ejército israelí reconoció en un comunicado que los ataques fueron dirigidos a «sospechosos» que operaban cerca de sus tropas en el norte de Gaza. Según el informe, estos sospechosos estaban en proceso de plantar un artefacto explosivo en la zona, lo que motivó la intervención de la Fuerza Aérea Israelí. Este nuevo brote de violencia agrava aún más la ya complicada situación en la región.
Estancamiento de las negociaciones y nuevas exigencias
El proceso de negociación para la segunda fase del alto el fuego sigue estancado debido a las nuevas exigencias planteadas por Israel y las demandas de Hamás. Según el acuerdo firmado en enero en Doha, se había establecido que, mientras las negociaciones para la segunda fase estuvieran en curso, se respetaría el alto el fuego. Sin embargo, las conversaciones mediadas por Egipto, Catar y Estados Unidos se han visto paralizadas por las «garantías» solicitadas por Israel, así como por la insistencia de Hamás en mantener su «derecho a la resistencia».
El estancamiento de las negociaciones ha generado incertidumbre sobre la continuación del proceso de paz y ha puesto en peligro los avances que se habían logrado hasta ahora. Fuentes cercanas a las conversaciones mediadas por Egipto y Catar han expresado su preocupación sobre la posibilidad de que las delegaciones involucradas en el diálogo no lleguen a un acuerdo para continuar con las negociaciones. Mientras tanto, la población de Gaza sigue sufriendo las consecuencias de la guerra y la falta de una solución definitiva.
Egipto propone una extensión temporal del acuerdo de tregua
Ante la crisis, Egipto, que ha jugado un papel fundamental como mediador en las negociaciones, presentó una propuesta para extender la primera fase del acuerdo de alto el fuego por dos semanas más. Según fuentes egipcias, una delegación israelí se espera en El Cairo en las próximas horas para estudiar esta propuesta. Esta extensión temporal del alto el fuego no incluiría las condiciones planteadas por el enviado estadounidense Steve Witkoff, quien había propuesto una prórroga de la fase uno del alto el fuego durante el mes de Ramadán.
La propuesta egipcia busca dar tiempo a las delegaciones para retomar las negociaciones, aunque las diferencias entre Israel y Hamás siguen siendo significativas. Mientras tanto, el reloj sigue corriendo y la tensión en Gaza aumenta, dejando a millones de civiles en una situación cada vez más incierta.