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El multimillonario y empresario Elon Musk, conocido por su enfoque disruptivo y su visión para reestructurar industrias, ha enviado un contundente ultimátum a los empleados federales. A través de una publicación en su plataforma X, Musk dejó en claro que los trabajadores deben justificar el trabajo realizado durante la semana pasada o, en caso contrario, deberán renunciar. La medida se produce en un contexto de recortes de personal y cambios en la administración pública de Estados Unidos bajo la dirección de Musk.
El ultimátum de Musk a los empleados federales
Este sábado, Elon Musk lanzó un mensaje directo a los empleados federales, estableciendo una clara directriz sobre la justificación de su labor. «De acuerdo con las instrucciones del presidente @realDonaldTrump, todos los empleados federales recibirán en breve un correo electrónico en el que se les pedirá que informen sobre lo que hicieron la semana pasada. La falta de respuesta se interpretará como una renuncia», escribió Musk en su cuenta de X.
El correo electrónico, enviado desde la Oficina de Gestión de Personal (OPM, por sus siglas en inglés), pide a los empleados que detallen al menos cinco puntos que describan lo que han hecho en el transcurso de la semana, y que envíen una copia de esa información a sus respectivos supervisores. Este mensaje se ha filtrado a medios como NBC News, donde fuentes familiarizadas con el asunto confirmaron que ya han comenzado a llegar los correos a los empleados federales.
El magnate Elon Musk, en una fotografía de archivo. EFE/Kenny Holston/Pool
El papel de Musk y la Administración Trump en los recortes
La medida tomada por Musk forma parte de los esfuerzos de la Administración Trump para reducir la burocracia y hacer la gestión federal más eficiente. En su publicación, Musk se refirió a su responsabilidad como líder del Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE) para llevar a cabo estos recortes y asegurarse de que el Gobierno sea más ágil y efectivo. La presión sobre los empleados federales es parte de un esfuerzo más amplio por revisar la eficiencia del personal gubernamental.
McLaurine Pineover, portavoz de la OPM, explicó que el objetivo de este correo es obtener un resumen del trabajo realizado por los empleados federales para poder evaluar mejor su desempeño. «Como parte del compromiso de la Administración Trump con una plantilla federal eficiente y responsable, la OPM está pidiendo a los empleados que proporcionen un breve resumen de lo que hicieron la semana pasada antes del final del lunes», comentó Pineover.
Reacciones a la medida: El sindicato se opone
La respuesta ante este ultimátum no se hizo esperar. Everett Kelley, presidente de la Federación Estadounidense de Empleados del Gobierno, condenó la medida y a Musk, calificándola de despectiva e irrespetuosa. Kelley afirmó que este tipo de acciones son una muestra de «desdén» por los empleados federales y los servicios esenciales que proporcionan al pueblo estadounidense.
“Es cruel e irrespetuoso con los cientos de miles de veteranos que visten su segundo uniforme como parte de la Administración pública. Este multimillonario desfasado, privilegiado y no electo nunca ha realizado una sola hora de servicio público honesto en su vida”, expresó Kelley en un comunicado. Este tipo de medidas se suman a la creciente tensión entre el sector público y la gestión de Musk al frente del DOGE, que ha propuesto recortes masivos en la plantilla federal y la reestructuración de agencias como la USAID.
El multimillonario Elon Musk. EFE/EPA/Allison Dinner
Desafíos en la reestructuración del gobierno federal
El ultimátum de Musk llega en medio de una reestructuración a gran escala en el Gobierno de Estados Unidos. Durante los últimos meses, la Administración Trump, con Musk al frente del DOGE, ha implementado cambios significativos en la estructura y el personal federal. Estos incluyen desde el despido de funcionarios federales hasta la reducción de agencias que se consideran ineficientes.
Uno de los casos más comentados fue el despido accidental de funcionarios del Departamento de Agricultura, quienes estaban trabajando en la respuesta del Gobierno a la gripe aviar. Este incidente levantó polémica sobre los efectos de los recortes impulsados por Musk, que han generado incertidumbre entre los empleados federales y una creciente preocupación por la eficacia de los servicios gubernamentales.
