El Gobierno de Panamá confirmó que mantiene a 299 migrantes deportados de Estados Unidos «bajo custodia temporal» en un hotel en la Ciudad de Panamá mientras se coordina su repatriación a sus países de origen. Según las autoridades panameñas, la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) y el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) son los responsables de organizar y ejecutar el retorno de los migrantes.
Detalles de la custodia temporal de los migrantes deportados
Los migrantes llegaron en tres vuelos desde la semana pasada, y actualmente se encuentran alojados en el hotel Decapolis, ubicado cerca de la Avenida Marítima en el centro de la capital. Este alojamiento temporal forma parte del acuerdo entre Panamá y Estados Unidos, en el que el país centroamericano ha actuado como «puente» para la repatriación de migrantes deportados.
Frank Ábrego, Ministro de Seguridad de Panamá, destacó que el país ha proporcionado atención médica y alimentación a los migrantes mientras esperan ser devueltos a sus países. Además, explicó que, aunque Panamá tiene la custodia temporal de los migrantes, las instituciones internacionales como la OIM y el ACNUR son las encargadas de gestionar su repatriación.
El ministro de Seguridad de Panamá, Frank Ábrego, habla en una rueda de prensa este martes. EFE/Carlos Lemos
Migrantes deportados aceptan retorno voluntario
De los 299 migrantes deportados, 171 han aceptado regresar de manera voluntaria a sus países de origen. Este proceso de retorno se lleva a cabo con el apoyo de la OIM y ACNUR, que están trabajando directamente con los migrantes para garantizar un regreso seguro. El Gobierno de Panamá ha asegurado que están comprometidos con la protección de los derechos humanos de estas personas y se está asegurando de que el proceso se desarrolle sin contratiempos.
Migrantes piden ayuda desde su alojamiento temporal
La situación de algunos migrantes ha generado preocupación. En el hotel Decapolis, un grupo de migrantes, aparentemente de origen surasiático, escribió mensajes de desesperación en las ventanas del establecimiento, solicitando ayuda. Entre los mensajes destacados se encontraba uno escrito por una niña, que pedía «Salvar a las chicas afganas», lo que generó una fuerte conmoción entre los presentes y en los medios de comunicación.
Personas muestran un cartel en una ventana del hotel Decápolis. EFE/ Carlos Lemos
Panamá se convierte en «puente» para deportaciones masivas de EE.UU.
El acuerdo entre Panamá y Estados Unidos ha sido clave en el contexto de las políticas migratorias de ambos países. Panamá ha aceptado ser un «puente» para las deportaciones, permitiendo que los migrantes deportados de EE.UU. sean primero albergados en la capital panameña y luego trasladados a la provincia de Darién, situada en la frontera con Colombia.
El Ministro de Seguridad destacó que Panamá no espera la llegada de más vuelos de deportación, ya que no se han acordado nuevos envíos de migrantes. A pesar de las dificultades políticas y sociales que enfrenta la región en términos de migración, Panamá ha aceptado este acuerdo con la finalidad de facilitar la repatriación de migrantes a sus países de origen.
Acuerdo de deportación con EE.UU. y el papel de Panamá
En virtud de este acuerdo, Panamá ha proporcionado las infraestructuras necesarias, como los albergues y la pista de aterrizaje, para facilitar las deportaciones de migrantes desde Estados Unidos. Estos vuelos son financiados por EE.UU., a través de la OIM y el ACNUR, que son los encargados de coordinar los traslados y asegurar el regreso seguro de los migrantes a sus países.
La situación en la región de Darién ha sido especialmente compleja en los últimos años debido a las estrictas políticas migratorias impuestas por Estados Unidos y la creciente dificultad para los migrantes de cruzar la peligrosa selva que conecta Panamá con Colombia. A pesar de los esfuerzos de los gobiernos de la región, la situación sigue siendo un desafío humanitario.