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El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, asistirá al Super Bowl LIX el próximo domingo 9 de febrero de 2025, un evento histórico, ya que es la primera vez que un mandatario en funciones presenciará el partido más importante del fútbol americano. El enfrentamiento entre los Kansas City Chiefs y los Philadelphia Eagles se llevará a cabo en el Caesars Superdome de Nueva Orleans, a partir de las 18:30 (hora del Este).
Seguridad en el Super Bowl LIX: Medidas excepcionales para el evento
El Super Bowl LIX ha sido clasificado como un evento de seguridad de nivel uno por el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) de Estados Unidos. Esta clasificación implica una coordinación máxima entre agencias federales, estatales y locales debido a la gran cantidad de personas que asistirán al evento y a las amenazas potenciales de seguridad. Se estima que más de 100,000 personas estarán presentes en la ciudad y en los alrededores del estadio, lo que ha motivado la implementación de un operativo de seguridad sin precedentes.
El DHS ha desplegado al menos 700 agentes especializados, además de contar con 2,700 efectivos de distintas agencias de seguridad, como la policía local, estatal, el FBI y el Servicio Secreto. Este fuerte dispositivo se produce en un contexto de alerta elevada, tras el ataque terrorista ocurrido el 1 de enero en Bourbon Street, donde un hombre embistió a una multitud con una camioneta, dejando 14 muertos y decenas de heridos.
Vista de un ‘halftime show’ durante la celebración de un Super Bowl, en una fotografía de archivo. EFE/Caroline Brehman
Medidas adicionales de seguridad ante la presencia del presidente Trump
La presencia de Donald Trump en el Super Bowl LIX añade un nivel de seguridad aún más alto. Los protocolos de protección presidencial se asemejan a los de una cumbre internacional, con estrictos controles de acceso y mayor presencia del Servicio Secreto en la ciudad. La planificación de su visita ha implicado medidas logísticas complejas, incluidas restricciones de tráfico y posibles cierres de carreteras y aeropuertos. Estas medidas son necesarias debido a los intentos de asesinato sufridos por el mandatario en los últimos meses, lo que ha aumentado considerablemente las precauciones para su seguridad.
El exagente del Servicio Secreto, Jonathan Wackrow, explicó que la seguridad del Super Bowl facilita la protección presidencial, pero también puede generar complicaciones logísticas dentro y fuera del estadio. A pesar de que el evento cuenta con altos estándares de seguridad, la visita de Trump requiere medidas adicionales que podrían afectar la ciudad, como el aumento de la presencia policial y la limitación del acceso en diversas áreas cercanas al estadio.
La seguridad en el Super Bowl LIX se intensifica tras los recientes ataques
A pesar de los refuerzos en la seguridad, el Departamento de Seguridad Nacional ha asegurado que no existen amenazas creíbles específicas contra el evento o sus actividades asociadas. Sin embargo, la agencia ha reforzado los protocolos de seguridad para garantizar la protección de los asistentes y las autoridades. Entre las medidas más destacadas, se prohíbe el uso de drones en los alrededores del estadio, y se realizarán barridos de seguridad tanto el viernes como el sábado previos al partido. Además, las personas que trabajan en la organización del evento han sido instruidas para no acudir al recinto en esos días, con el fin de facilitar las inspecciones.
La NFL, a través de su jefa de seguridad, Cathy Lanier, ha asegurado que se han revisado exhaustivamente los planes de contingencia y respuesta ante emergencias, para garantizar que la seguridad del evento esté a la altura de las circunstancias. Además, el Super Bowl LIX ha sido catalogado como un NSSE (National Special Security Event), lo que implica el uso de todos los recursos de seguridad del gobierno federal, incluidos los procedimientos de detección de amenazas químicas, biológicas y radiológicas.
Aficionados y figuras políticas se reúnen en Nueva Orleans para el Super Bowl LIX
Además de la presencia de Trump, el evento contará con la asistencia de diversas figuras políticas y empresarios. Se espera que el presidente de la Cámara de Representantes, Mike Johnson, oriundo de Luisiana, también esté presente en el Super Bowl LIX. La lista completa de invitados aún no ha sido confirmada, pero se anticipa que varios miembros del gobierno y personalidades del ámbito político acompañarán al mandatario durante este histórico evento deportivo.
Un Super Bowl histórico y con gran expectativa deportiva
En cuanto al aspecto deportivo, este será el tercer Super Bowl consecutivo en el que los Kansas City Chiefs participarán, mientras que los Philadelphia Eagles buscarán una revancha, luego de perder el título en 2023. Los aficionados están ansiosos por ver cómo se desarrolla este emocionante enfrentamiento entre dos de los equipos más destacados de la NFL.
En el espectáculo de medio tiempo, el aclamado artista Kendrick Lamar será el encargado de la presentación musical. Además, como es tradicional, el inicio del juego contará con la ceremonia de lanzamiento de la moneda, que en ediciones anteriores ha sido realizada por expresidentes de Estados Unidos como George H.W. Bush en 2002 y 2017, y Ronald Reagan en 1985, aunque este último lo hizo de manera remota desde la Casa Blanca.
