Las organizaciones sociales leales al expresidente de Bolivia Evo Morales confirmaron este miércoles que él se presentará en las elecciones nacionales de agosto con un nuevo partido político. Esto surge tras haber perdido el liderazgo del Movimiento al Socialismo (MAS), partido que lo llevó a la presidencia, y tras la orden del Tribunal Supremo Electoral (TSE) de reconocer a Grover García como nuevo presidente del MAS, figura cercana al actual gobierno de Luis Arce. A finales de marzo se hará el «relanzamiento» de una nueva opción política, según informaron los voceros de las agrupaciones afines a Morales.
El relanzamiento del nuevo partido político
Pedro Llanque, dirigente campesino y cercano a Evo Morales, explicó en conferencia de prensa que las organizaciones que apoyan al expresidente se reunirán en un congreso los días 29, 30 y 31 de marzo en el departamento central de Cochabamba, para «hacer conocer la refundación del instrumento político». Esta fecha marca un punto de partida para la creación de un nuevo partido que se presentará como alternativa al MAS en las elecciones presidenciales de agosto.
El congresista destacó que el objetivo principal de este encuentro será definir el nombre y la estructura del nuevo partido, así como crear un plan estratégico para el lanzamiento de la campaña nacional, que empezará con la socialización del proyecto político a todos los sectores del país.
Personas participan en la celebración del Día del Estado Plurinacional este miércoles, en Cochabamba (Bolivia). EFE/Jorge Ábrego
La pérdida del liderazgo del MAS y el conflicto interno
Este nuevo partido político surge luego de que Morales perdiera el liderazgo del Movimiento al Socialismo, el partido que fue clave en su ascenso al poder. La decisión del TSE, que avaló un congreso organizado por los sectores «arcistas» o afines al presidente Luis Arce, reconoció a Grover García como nuevo presidente del MAS, en reemplazo de Morales.
Este cambio de liderazgo en el partido oficialista fue ratificado tras un fallo constitucional que validó el congreso de mayo de 2023, organizado por los seguidores de Arce. A su vez, la facción «evista» —los leales a Morales— celebró su propio congreso en octubre de 2023 en el Trópico de Cochabamba, donde proclamaron a Morales como «candidato único» para las elecciones presidenciales.
El conflicto interno del MAS refleja una profunda división dentro del oficialismo, entre los sectores que siguen a Evo Morales y aquellos que están alineados con el actual presidente Luis Arce. Las tensiones aumentaron después de que Morales perdiera el control del partido y comenzaran a surgir disputas sobre quién debería ser el candidato presidencial del MAS en los comicios de agosto.
La lucha por la candidatura presidencial
El anuncio del relanzamiento de un nuevo partido ha generado debates sobre la candidatura presidencial de Evo Morales, quien aún tiene la intención de postularse pese a la sentencia constitucional de diciembre de 2023 que establece que la reelección presidencial en Bolivia está permitida solo una vez, ya sea de forma continua o discontinua. Morales gobernó Bolivia en tres períodos consecutivos (2006-2009, 2010-2014 y 2015-2019), lo que según la interpretación de algunos sectores legales, le impediría postularse nuevamente.
No obstante, los grupos cercanos a Morales sostienen que la reelección es un derecho legítimo, argumentando que la situación actual permite una reinterpretación de las reglas constitucionales. Además, insisten en que Morales sigue siendo el candidato más fuerte para liderar al bloque popular por Bolivia, que tiene el respaldo de numerosas organizaciones sociales y campesinas.
El dirigente de la confederación única de trabajadores campesinos de Bolivia, Pedro Llanque (c) y el ejecutivo de la Confederación de Comunidades Interculturales, Enrique Mamani (d), afines al expresidente Evo Morales (2006-2019) asisten a una rueda de prensa este miércoles, en la Dirección Nacional del Movimiento Al Socialismo (MAS) en La Paz, (Bolivia). EFE/ Luis Gandarillas
El futuro del MAS y las reformas internas
Mientras tanto, los sectores que responden al presidente Luis Arce también están organizando su propia agenda política. El MAS, bajo la nueva presidencia de Grover García, tiene previsto realizar un congreso los días 21 y 22 de marzo en El Alto, con el objetivo de reformar los estatutos del partido y realizar una «renovación» interna. Este congreso podría ser clave para definir las líneas a seguir en cuanto a la candidatura presidencial del MAS.
Los dirigentes del MAS han señalado que en este congreso se discutirán temas importantes, como la elección de los candidatos a la presidencia y vicepresidencia de Bolivia. Algunos especulan que el presidente Arce podría postularse nuevamente para su reelección, aunque hasta ahora no ha confirmado oficialmente su candidatura.
El dirigente de la confederación única de trabajadores campesinos de Bolivia, Pedro Llanque simpatizante del expresidente Evo Morales habla durante rueda de prensa. EFE/Luis Gandarillas
La crisis económica y las tensiones políticas
Las tensiones internas del MAS se desarrollan en un contexto de crisis económica en Bolivia. La falta de dólares y las dificultades financieras que atraviesa el país han complicado la situación política, y la lucha por el liderazgo del MAS parece acentuarse con la proximidad de las elecciones presidenciales. La división entre los seguidores de Arce y Morales está afectando no solo al partido, sino también a la cohesión del gobierno y a la estabilidad política del país.
Con la campaña electoral cada vez más cerca, las fuerzas leales a Evo Morales y el sector que apoya a Luis Arce se preparan para una batalla política por el control del MAS y la representación del bloque popular por Bolivia en las elecciones presidenciales de agosto.