El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, hizo este lunes un llamado a la reconciliación, la esperanza y el trabajo conjunto para construir un país más justo y solidario, en su mensaje anual de Navidad.
«Este es el momento de renovar nuestra esperanza. Esperanza en un país más justo. Un Brasil sin hambre, donde cada mujer y cada hombre tenga un trabajo digno y tiempo para ver crecer a sus hijos», dijo Lula.
En un breve mensaje transmitido en directo por televisión, radio y redes sociales, Lula señaló que la base de todo lo que hace su Gobierno está en el diálogo y el trabajo conjunto que realiza con la sociedad civil y los gobiernos regionales, «en la armonía» entre el Ejecutivo, el Legislativo y el Poder Judicial y en la defensa «intransigente» de la democracia.
Fotografía del presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva (c), luego de participar en una reunión ministerial el viernes 20 de diciembre. EFE/ Andre Borges
Economía brasileña en crecimiento
«Todavía tenemos enormes desafíos por delante. Pero hoy Brasil tiene una economía fuerte, que sigue creciendo. Un gobierno eficiente, que invierte donde más importa: en la calidad de vida de la población brasileña», enfatizó el mandatario brasileño en referencia a la previsión de que el país terminará el año con un crecimiento del 3,5 %, por encima del 3,2 % registrado en 2023.
El mandatario brasileño, sin embargo, recalcó que aunque ya se está comenzando a recoger los frutos de lo sembrado en sus dos primeros años de gestión, «aún queda mucho por hacer» y «hay que seguir sembrando».
En 2025 «redoblaremos nuestros esfuerzos para la siembra. Y que la cosecha sea cada vez más generosa», afirmó.
Foto: EFE
En un país aún polarizado políticamente, Lula aprovechó la ocasión para defender la reconciliación entre los hermanos y que las familias puedan festejar la Navidad unidas.
Con el sombrero Panamá que viene utilizando para ocultar las heridas de su reciente intervención quirúrgica, el líder progresista también agradeció los mensajes de cariño y solidaridad que recibió de la población brasileña.
«Gracias a esta cadena de solidaridad estoy aún más firme y fuerte para seguir haciendo que Brasil funcione», aseguró.