MLS. San Diego FC le ofrece la oportunidad de jugar en el equipo de su ciudad. El centrocampista del Celta aún no ha tomado una decisión definitiva.
MLS. A lo largo de la próxima semana se espera que Luca de la Torre reciba el alta médica. El centrocampista estadounidense ha participado con normalidad en los últimos entrenamientos del Celta y parece haber superado la lesión en el tobillo derecho que le ha obligado a estar dos meses de baja. Durante ese periodo el futbolista californiano ha podido reflexionar respecto a la decisión que debe tomar de cara al próximo mercado de invierno. San Diego FC, la nueva franquicia de la Major League Soccer (MLS) norteamericana, mantiene el interés en reclutarlo para su flamante proyecto y continúa aguardando a que el interior resuelva definitivamente la incógnita sobre su futuro.
Tan expectantes como los dirigentes de San Diego FC se encuentran los del Celta, que necesitan aligerar la nómina de la plantilla en el mes de enero. Descartado por Claudio Giráldez el pasado verano, De la Torre es el único jugador del vestuario celeste que aún no ha disputado minutos oficiales en lo que va de temporada. Más allá de que pueda estrenarse en la próxima eliminatoria de la Copa del Rey, sus opciones de hacerse un hueco en los planes del técnico de O Porriño son muy remotas. Con contrato en Vigo hasta 2026 y con el Mundial que acogerá su país cada vez más cerca, a poco más de año y medio, su salida de la entidad olívica parece más que probable. La cuestión es el destino.
A favor de la propuesta que tiene sobre la mesa de la MLS hay un factor de mucho peso. El centrocampista nació en San Diego, por lo tanto, la franquicia que debutará oficialmente el próximo mes de febrero le ofrece la oportunidad de jugar en su ciudad. Además, el proyecto californiano apunta alto. En la nómina de fichajes que ya han sido anunciados sobresale uno, el del internacional mexicano y en su día objetivo céltico Hirving ‘Chucky’ Lozano.
Las dudas sobre qué va a hacer De La Torre responden, sobre todo, a un motivo. Su sueño siempre ha sido triunfar en Europa. Por esa razón, en 2013 aterrizó en Londres siendo un niño para enrolarse en la cantera del Fulham y a sus 26 años lleva casi media vida en el viejo continente. El vínculo que le une al fútbol de su país se limita a su trayectoria en la selección dado que nunca ha jugado el campeonato estadounidense.
El dilema está servido y el tiempo se va agotando para que la balanza se decante hacia uno u otro lado. Mientras tanto, el interior continúa con su puesta a punto y en el Celta hay unanimidad, a todos los niveles, a la hora de catalogar su actitud como intachable. El adiós de una de las apuestas de futuro de Luís Campos tampoco supondría un alivio demasiado relevante a nivel económico. Después de dos años y medio en Vigo, la puerta la tiene abierta por una mera cuestión futbolística. Desde A Sede no le van a meter prisa.