El Departamento de Policía del condado de Fulton, Georgia, informó este martes sobre múltiples denuncias con amenazas recibidas en centros de votación para las elecciones presidenciales, en una zona que resulta vital para quien gane este estado clave.
A causa de estas amenazas, los recintos electorales localizados en Etris Community Center y Gullatt Elementary, en la ciudad de Union, “permanecieron cerrados durante un corto espacio de tiempo” esta mañana.
El Departamento de Elecciones y Registro del condado de Fulton solicitó una orden de tribunales para que estos centros permanezcan abiertos hasta recuperar el tiempo que estuvieron cerrados.
La policía recordó que la interrupción del proceso electoral está considerado un crimen y cualquier individuo encontrado culpable de realizar “amenazas disruptivas” se enfrentará a cargos penales.
“Queremos asegurar a los votantes que su seguridad es nuestra máxima prioridad”, señaló la policía y agregó que está coordinando acciones con todas las demás fuerzas del orden del condado de Fulton para “prevenir” y “actuar” ante cualquier incidente.
Las urnas abrieron este martes en Georgia con los reflectores puestos en este decisivo estado, donde más del 50% de los electores sufragó de manera anticipada y en el que la demócrata Kamala Harris y el republicano Donald Trump se encuentran en un virtual empate.
Debido a la alta afluencia de electores anticipados, la Secretaría de Estado de Georgia estimó que cuando cierren las urnas, a las 7 de la noche, el 70 % de las boletas estarán listas para ser tabuladas.
Con 16 votos electorales, Georgia es uno de los siete estados indecisos, junto con Nevada, Arizona, Wisconsin, Míchigan, Pennsylvania y Carolina del Norte, que son considerados cruciales para las aspiraciones de ambos candidatos por la presidencia.